En Xela, se celebró un encuentro empresarial organizado por la Cámara de Comercio de Quetzaltenango, en el Latam Hotel, del cual tomé algunos apuntes que considero de gran valor. Quiero felicitar a los organizadores e instarlos a continuar con estas iniciativas que fortalecen la Ciudad del Conocimiento y proporcionan herramientas para el crecimiento en los negocios.
Compartiré algunos apuntes de dos de los expositores: el Pastor Juan Pablo Avelar, un maestro de la Palabra, y el Doctor Sergio Madrazo, un estratega de negocios de alto nivel.
A continuación, presento mi interpretación basada en las ideas de ambos.
Existe una doble fe: no solo en Dios, el dador de todo, sino también en nosotros mismos. Fe y empresa no están en conflicto; de hecho, esa combinación es clave para el éxito.
Muchos negocios no progresan como desean, y esto se debe a la falta de sistemas. Toda empresa debe contar con sistemas bien estructurados. La contabilidad, por ejemplo, no debería ser solo para cumplir con las obligaciones fiscales, sino una herramienta para la toma de decisiones.
Todo se construye o se destruye a partir del liderazgo, por eso, «el líder es la clave o es el clavo». Es crucial detenerse en este punto.
Existen algunos pasos clave para alcanzar un liderazgo de alto nivel. Primero, debemos tener un afán de servicio; servir debe ser el propósito más elevado de cualquier negocio.
Muchas personas se enfocan en atraer y atender clientes, pero debemos recordar que nuestros primeros clientes son nuestros colaboradores.
Un tema recurrente que he mencionado aquí es el dominio de las emociones. Como recordatorio, solo debemos enfocarnos en dos cosas: administrar bien nuestro tiempo y gestionar adecuadamente nuestras emociones. «El hombre que se domina a sí mismo es más poderoso que aquel que domina una ciudad».
Estamos llamados a construir y mantener metas muy ambiciosas; por ello, necesitamos líderes seguros y perseverantes, que actúen con «una santa terquedad».
No tengan miedo de nada, ni de la competencia, porque el crecimiento de una persona se debe más a lo que es, que a lo que hace. La pregunta es, ¿quién soy yo? Hay que saber direccionar el recurso, pero trascendental va a ser llegar a ser uno la dirección del recurso. ¡Gracias!
Licenciado en Ciencias de la Comunicación, con tres maestrías en diferentes campos y Doctor en Investigación en Educación. CEO de La Voz de Xela, conferencista nacional e internacional y profesor universitario.