Gobierne su mente… o ella le gobernará a usted».
Para que usted haya desarrollado los desagradables síntomas de la ansiedad, tuvo que haber empleado muchas horas de energía mental. Con pensamientos pesimistas repetitivos. Energía que se vuelve en contra de usted.
Las personas que han caído en el ciclo de la ansiedad llegan a preocuparse tanto de esos síntomas, que esa misma preocupación hace que aumenten los síntomas, entonces se preocupan aún más. Y cuando se dan cuenta de que son esos mismos pensamientos anticipatorios los que le están enfermando, se encuentran con que fallan en su intento por detenerlos, y entonces más ansiedad.
Para controlar su mente puede usar estas técnicas, ofrézcale a su mente en qué debe pensar, para decirle qué no debe pensar. El mejor pensamiento son los recuerdos bonitos. Para ello trasládese a ese lugar y esa fecha, y recorra con detalle lo vivido. Use su diálogo interno para describir la escena.
También puede ofrecerle fantasía, que consiste en imaginar cosas irreales espectaculares, como volar, pasear en un jardín inmenso, visitar ciudades extrañas, relacionarse con entidades geniales.
Además, puede ofrecerle acertijos para resolver, es mejor si estos son nobles, como por ejemplo, ¿de qué manera se puedo acabar la pobreza en el mundo? ¿Cómo sería un mundo sin violencia? ¿Cómo puedo agradar a alguien? También pueden ser adivinanzas o juegos intelectuales.
Asimismo, si su mente se centra testarudamente en querer evitar tal suceso posible, usted puede ofrecerle esta pregunta: ¿Qué es lo peor que puede pasar? Luego aceptar eso con la frase, “ah bien, si eso es lo peor, entonces que pase ¡y qué! También puede hacer esquemas de esas situaciones, y en la parte de abajo escribir una decisión factible para controlarlo.
Así es que piense en su mente como en una computadora, en donde usted activa un programa y ella procesa lo que se le pide. Dese cuenta que su conciencia analiza y sintetiza, saca concatenaciones que son erróneas. Concluye de todo lo procesado para verlo simple, sin embargo, tiene falencias, que cuando se confrontan con la realidad le desequilibran más.
Le dejo la siguiente frase para que reflexione, “utiliza el potencial de tu mente, no que su mente utilice tu potencial”.
Psicólogo clínico con más de 25 años de experiencia, docente universitario, escritor de temas de salud mental para la familia, la pareja y el niño. <strong>YouTube:</strong> Mil tips de Salud Mental y Escalón Infantil <strong>Facebook:</strong> Oswaldo Soto Psicólogo