Continuando con el tema de la jurisprudencia, es importante afirmar que quizá el punto más relevante se halla en relación al papel que desempeña esta en relación al conjunto del cuerpo social. En efecto, su gran importancia radica fundamentalmente en su capacidad de ofrecer un sentido jurídico específico a determinadas conductas. El juez que emite una sentencia, como órgano que toma una determinación, produce la creación de un precedente, de una regulación existente sobre un tema particular, que supone la garantía de un ordenamiento estable de los comportamientos de los diversos componentes de la sociedad.
Se generan en este sentido unas pautas determinadas, que son lentamente conocidas por la sociedad en general. Así, lo que se promueve es la seguridad de que existen normas claras sobre el modo en que un determinado cuerpo social se arroga el juzgamiento de determinados hechos. Se crean patrones sobre los temas que poseen tres sentencias similares ya existentes, ofreciendo certeza acerca del futuro tratamiento que, desde el organismo judicial, esos mismos temas tendrán en el futuro. En otras palabras, la población sabe a qué atenerse en esos temas.
No obstante, para generar jurisprudencia sobre una determinada cuestión no basta una sola sentencia de parte de un magistrado particular. Resulta necesario que existan ciertos mecanismos a través de los cuales se manifieste una amplia aceptación respecto a las resoluciones de un magistrado. El primer medio para que esto sea llevado a cabo radica en sucesivos fallos de otros jueces que vengan a confirmar lo que ya había sido manifestado previamente. De este modo, el precedente se consolida y se termina de sentar una jurisprudencia sobre el tema.
La resolución originaria gana en solidez en la medida en que es confirmada por otros órganos de la colectividad encargados de dirimir esta clase de conflictos. El otro modo en que esto puede ser alcanzado es por medio de las decisiones adoptadas por el más alto Tribunal, ya que de esta forma la resolución posee un gran prestigio. Ello se debe principalmente a que, como máxima instancia en materia judicial, dicho tribunal cuenta con una elevada cuota de respeto de parte de la sociedad en su conjunto. En tanto es el portavoz de todo el organismo encargado de dictar sentencias, sus decisiones son consideradas válidas a la hora de establecer precedentes respecto a las conductas de los miembros de la generalidad. De esta forma, queda en evidencia que sus directrices son equivalentes -siempre que se haga referencia a la garantía de un nivel de aceptación para una decisión puntual a los fallos sucesivos en un mismo sentido de varios magistrados de menor jerarquía-.
Es de advertir que la jurisprudencia no es estática, es dinámica, las cortes pueden apartarse de su doctrina. Deben fundamentar las razones del porqué adoptan esa decisión, es por ello que los estuosos del derecho de manera disciplinado van a la vanguardia de los cambios jurisprudenciales.
Abogado, juez; magister en Derecho Penal, Notarial, Procesal Civil y Mercantil; doctor en Ciencias Penales y docente universitario.