El hombre más rico de Europa es de nacionalidad francesa, y se llama Bernard Arnault, con una fortuna de ciento setenta y tres billones ocupa la casilla número tres en la lista de los hombres más millonarios del mundo, y llama la atención que su empresa no produce ningún producto, sino que él desempeña un rol a nivel global y mundial de un intermediario en el mercado, es decir, que él no produce los productos, sino que está “en medio” entre el productor y el consumidor, a esa figura se le conoce como: intermediación.
La figura del intermediario en los mercados es la de aquellos líderes que, sin producir productos, se colocan en una posición estratégica entre el que produce y el que los consume; y esto potencializa su liderazgo en el caso de Bernard Arnault, convirtiéndolo en el hombre más rico de Europa y en el tercer hombre más millonario del mundo.
La palabra de Dios nos muestra en la historia de José, que cuando llegó el tiempo de hambruna todos los egipcios buscaron al rey de Egipto, llamándole popularmente como el Faraón, y el faraón les dijo: Vayan a ver a José, y hagan lo que él les diga; ese momento determina el liderazgo de intermediación en los mercados de José porque el faraón que tiene los productos y los egipcios que son los consumidores del producto llamado trigo, colocan en medio de ellos a una figura de un líder llamado José que es el que termina desarrollando y desempeñando el papel de intermediario en el mercado de Egipto. Eso potencializa el liderazgo de José, y hace que José se convierta en un atractor de recursos, llegando a recaudar todo el dinero, todo el ganado, y todas las tierras de Egipto que sin producir los recursos y sin consumirlos se coloca entre aquel que los produce y aquel que los consume.
El francés Bernard Arnault, es ejemplo contemporáneo de la valiosa figura del intermediario en los mercados. Y José dos mil años antes de Cristo nos muestra que la economía y los mercados en aquel tiempo funcionaban de la misma forma, así que como emprendedor y empresario debes de darle énfasis a la figura del INTERMEDIARIO, en los mercados locales, nacionales e internacionales porque eso potencializará tu economía, llevándote como José a construir un imperio económico o como Bernard Arnault colocándote como el hombre más rico de tu región.