Debido a la ignorancia total en el arte de gobernar o quizá a la conveniencia cínica corrupta de Jimmy Morales, ahora el país está en el ojo del huracán –huracán = Donald Trump- esperando la investida que ojala cuando toque tierra, no vaya a ocasionar más daño que la misma administración de Jimmy Morales hasta el día de hoy.
La otra vez escribí, salimos de una y luego caemos en otra. Como ciudadano común, al despertar cada mañana ruego a Dios no permitirle al “presidente” hacer o decir otra estupidez, o, que la estupidez de hoy, traiga menos consecuencias al país, que la estupidez de ayer.
Resulta “asombroso” que desde hace muchos días, no teníamos noticias de las cámaras empresariales todas aglutinadas en el CACIF, no dijeron casi nada sobre el proceso eleccionario de la primera vuelta, no se pronunciaron respecto a que, si hubo o no fraude, ¿qué raro verdad?, sin embargo, cuando salió al espacio cibernético el tuit del señor Trump, anunciando la imposición de aranceles e impuestos a las exportaciones y a las remesas familiares, todo, porque Jimmy Morales se echó para atrás en aceptar que Guatemala se convirtiera de la noche a la mañana, en tercer país seguro.
Sin ninguna duda, Jimmy Morales carece de personalidad y de vergüenza. Le mintió a Macri –presidente de Argentina, Aviones Pampa III-, ahora le mintió a Donald Trump, pero lo más cínico e imperdonable es, que le siga mintiendo al pueblo de Guatemala y sobre todo a los miles de inmigrantes que financiaron su campaña electoral en 2015.
Es complicado el proceso para materializar las amenazas de Trump, -aranceles e impuestos a las exportaciones y remesas familiares-, pero, acordémonos que ellos –EEUU- hacen cualquier cosa en cualquier lugar del mundo, para lograr sus propósitos, sin embargo, es preciso analizar los efectos económicos y sociales que esto trae para Guatemala.
Señor Trump, las caravanas que están saliendo de los países pobres y subdesarrollados hacia Estados Unidos, el 99% no son delincuentes, al contrario, huyen por las acciones de los delincuentes de cuello blanco –políticos y empresarios- que están ostentando el poder en sus respectivos países, en el caso específico de Guatemala, tenemos al presidente mejor pagado de Latinoamérica, pero al peor presidente de toda la vida política de nuestro país, eso, como muestra un botón.
Y, ¿quién grita por la comunidad migrante que ha enviado desde el año 2010 a 2018 remesas al país por el orden de 54 mil 861 millones 760 mil 600 quetzales? No nos olvidemos que, gracias a esos miles de millones de quetzales, la económica del país está estable, significa casi el 10 % del PIB . Tuve la oportunidad de entrevistar al vice presidenciable del partido VAMOS, y uno de sus ejes del plan de gobierno, es la canalización de las remesas familiares a través de cooperativas, es decir, formar cooperativas del migrante, sin embargo, a la fecha, ni él –Guillermo Castillo- ni Giammattei se han pronunciado sobre la amenaza de un impuesto a dichas remesas.
No se necesita ser analista ni mucho menos para concluir que Guatemala, en las actuales circunstancias no puede ser tercer país seguro. Para nadie es un secreto, no tenemos gobierno, el que está fungiendo como tal, no nos quiere ni puede darnos seguridad -seguridad en el más amplio sentido de la palabra-, cómo fregados pretende darle seguridad a los migrantes que vendrían a nuestro país.
Contador público y auditor, docente universitario y ex alcalde comunitario.