Miro con mucha preocupación que este evento no tenga un manejo profesional, en el nivel que merece, y las deficiencias ya comienzan a ser evidentes. Desde esta columna cumplimos con la responsabilidad de ser aporte, y lejos de señalar tan solo el problema, propongo las soluciones que deberían ser consideradas para obtener mejores resultados».
En un contexto de crecimiento económico generalizado en toda América Latina y el mundo, las ferias y exposiciones son el medio cada vez más utilizado por las empresas, sector productivo y ciudades, para difundir sus servicios y productos, para tomar contacto directo o contacto cara a cara con sus clientes y visitantes.
¿Qué son las ferias?
Una feria es un evento social, económico y cultural —establecido, temporal o ambulante, periódico o anual— que se lleva a cabo en una sede, y que llega a abarcar generalmente un tema o propósito común.
Hoy escuché en una radio local a la encargada de la comunicación de la Municipalidad de Quetzaltenango, cuyo nombre desconozco, a razón que omitió decirlo, a la concejala Mirta García y al mismo Alcalde Luis Grijalva, promocionando la feria icono de esta región del país, y que congrega una inusitada cantidad de visitantes de todo el mundo, insisto en esto, del todo el mundo, ya que he comprobado de forma directa la presencia de ciudadanos de otro países. En los dos últimos años se observaron expositores de al menos seis países. El año anterior comprobé presencia de ecuatorianos, colombianos, salvadoreños, mexicanos, nicaragüenses como expositores, más la visita de las candidatas a Reina de las festividades, que sumaban una docena de nacionalidades.
Miro con mucha preocupación que este evento no tenga un manejo profesional, en el nivel que merece, y las deficiencias ya comienzan a ser evidentes. Desde esta columna cumplimos con la responsabilidad de ser aporte, y lejos de señalar tan solo el problema, propongo las soluciones que deberían ser consideradas para obtener mejores resultados.
1. Organización: revisando la estructura de organización de las ferias más importantes de América, pocas son las que la responsabilidad de organización está en la corporación municipal, la mejores ferias son administradas por una empresa especializada, o formada por un grupo de entidades que son el soporte económico de la ciudad, más la municipalidad. Esto debe ser corregido y se debe proponer en futuro, se unan voluntades para construir un modelo de gestión distinto. Hay ejemplos, sí, y muchos; las ferias más representativas de Guatemala son dirigidas por personal profesional en organización de eventos y ferias.
2. Local: desde hace rato considero que el local actual ya no es adecuado, tanto por la ubicación, cuanto por el acceso; estar al borde de una carretera principal, lejos de ser un beneficio crea un grave problema vehicular, que en un momento de emergencia lo único que generaría es una desgracia de dimensiones incalculables. Conviene entonces pensar en la reubicación del sitio, entiendo que en el nuevo POT ya debe estar definido este punto.
3. Productos: hasta el año pasado, al menos el 40 % fueron locales de comida, un 30 % fue ropa confeccionada. Esto no es lo que el visitante quiere observar, quien asiste a la feria quiere ver artesanías, productos de fabricación local, ver el desarrollo de la industria local, productos de innovación de emprendimientos actuales. Y esto no se ve en la feria. Y bien podría estar normado en un reglamento que defina cada espacio y tipo de producto.
4. Servicios: Fue terrible el año pasado, el momento que ingresaron las reinas de otros países una de ella requirió de un servicio sanitario, y fue vergonzoso lo que pudo ver, estos están vetustos, sin mantenimiento, hoy ya deberían estar al menos unas seis baterías de sanitarios ubicados en distintos sitios para uso de los visitantes.
5. Juegos mecánicos: no permitir si estos no cumplen con los mínimos requerimientos de seguridad y calidad. Los deL año pasado eran un riesgo usarlos, y peor es reconocer que algún funcionario haya autorizado su instalación, eso constituye irresponsabilidad.
6. Tecnología: resulta extraño, por decir lo menos, que no exista una página web exclusiva para la compra de espacios, y que el trámite sea ágil y seguro; hoy que el interesado debe ir al menos dos veces a una oficina para realizar la compra de un estand. A esta altura de avance tecnológico permite, por ejemplo, que se realice la compra de un lugar en una feria en Perú, online. Sin necesidad de ir personalmente.
7. Nivel de la feria: insisto en este punto, la muestra debe ser el reflejo del sector productivo de la ciudad, y resaltar los valores culturales a través de la venta de artesanías, bienes y servicios innovadores.
8. Transparencia: conforme se desarrolla la comercialización de la feria, debería estar la información accesible a todos los interesados y ciudadanos que quieran conocer el avance, desarrollo y resultados de la misma. Los valores de ingreso deben estar claramente bien señalados con carteles y bien ubicados, así mismo el horario de la feria.
9. Seguimiento: ¿cuánto fue el real impacto en la dinámica económica del municipio, y las perspectivas de mejora? Esto debe ser siempre bien registrado, para determinar si es verdad el costo beneficio del evento en el desarrollo de la ciudad.
10. Seguridad: cumplimiento de los protocolos de las diversas entidades que deben cuidar por el bien común y por atender algún hecho o contingencia no consentida. La señalética y personal de apoyo deben estar plenamente identificados, así como prohibir que se coloquen vendedores en la vía de acceso al recinto ferial.
Si la calidad de la feria, tanto en sus servicios y organización, tiene un mejor nivel, los resultados económicos también podrán ser mayores. Esta feria es parte de la identidad de la ciudad, por lo que merece tener un nivel de calidad que supere las expectativas de los participantes y visitantes.
Caso contrario se corre serio riesgo de ir perdiendo espacios, y por ende también el peligro de desaparecer.