En Guatemala está vigente una Ley y Reglamento de tránsito, en donde se establecen los requisitos que se deben de cumplir para que las personas puedan conducir vehículos dentro de los cuales están las motos. Dentro de estos requisitos se establece que los pilotos de moto deben utilizar un chaleco con franjas de material reflectivo, tener impreso el número de placa, y utilizar casco, entre otros requisitos.
En la mayoría de los casos no se cumple ninguno de los requisitos descritos anteriormente, pero, más delicado aún es que no se cumpla con que algunos pilotos estén conduciéndose por las calles sin tener licencia, poner pide vías o correr a altas velocidades sin respetar los límites de velocidad, conducir bajo efectos de licor, e irrespetando los carriles por donde deben ir. Además, los usuarios compran las motocicletas sin saber manejar y se ponen a practicar en calles y avenidas residenciales, poniendo en grave peligro a quienes por ellas transitan.
Lo anterior genera un grave riesgo para los conductores de moto, pero representa un riesgo más grande para los peatones y conductores de otros vehículos porque prácticamente están a merced de personas que en cualquier momento estará provocando accidentes que pueden ir desde leves hasta graves.
Pero, ante todo este escenario, las autoridades responsables de verificar el cumplimiento de la ley y reglamento de tránsito no se han enfocado en este problema, y ante la falta de controles, verificaciones, y falta de la imposición de sanciones proliferan cada día más las personas que de manera irresponsable conducen motos por toda la ciudad. Es urgente que se ponga un alto, especialmente por el riesgo que corren los pilotos de moto que llevan a dos o tres personas sin los implementos necesarios para conducirse, poniendo en riesgo su vida.