Además del cúmulo de desaciertos y torpezas, que desde un principio se atribuyen a la actual administración gubernamental, para continuar con ellas, surgen dos nuevas acciones para seguir poniendo en ridículo a Guatemala ante el mundo, poner en vergüenza la dignidad de los guatemaltecos y de manifiesto que estamos frente a un mandatario que, o supera la ignorancia que se atribuyó a Romeo Lucas García cuando gobernó al país, está pésimamente asesorado, o por ignorancia o inocencia, no se ha dado cuenta de que está siendo manipulado por intereses ajenos a los que tiene obligación de representar y defender: los intereses de Guatemala y de los guatemaltecos; puede ser cualquiera de estas tres o, tal y como se observa sus actuaciones, son las tres juntas.
Primero, decide sitiar la sede de la Cicig con vehículos artillados, una numerosa tropa y desfilar por la proximidad de algunas embajadas en forma intimidatoria, como si tuviera que enfrentar a un ejército que resultó inexistente; luego, se presentó rodeado de un pelotón militar, dos ministros, algunos jefes militares y los cómplices, que lo siguen acompañando en sus ocurrencias: el vicepresidente, el ministro de Gobernación, el vice del mismo y el jefe de la Policía, para anunciar que no validará la permanencia de la Cicig a partir de septiembre de 2019. Finalmente, para concluir sus payasadas, ordena que no se permita el ingreso al país de Iván Velásquez, quien, en el momento de ordenar esta veda, se encontraba en Estados Unidos cumpliendo compromisos de su encargo. Si estas acciones se califican como payasadas, es porque las mismas permiten presumir que el protagonista ignora o pierde de vista que no es igual ser cómico de carpa, de circo o de segunda, que ser presidente de un país que merece más respeto y ser dignificado ante los demás países del mundo: nuestro querido Guatemala.
Es mucho lo que podría destacarse sobre las últimas acciones antes señaladas; si a ellas agregamos el cúmulo de los desaciertos a lo largo del tiempo que el protagonista lleva en el ejercicio del poder, puede concluirse que esta administración, hasta el momento, es y sigue siendo un fracaso. Para saber si se trata de una percepción equivocada, basta preguntarnos en qué hemos avanzado, tanto económica, como política y socialmente. Lo cierto es que, a partir de cuando, como parte de las investigaciones de la Cicig y el Ministerio Público, fueron consignados el hijo y el hermano por las tranzas en el Registro de la Propiedad, se desató la insaciable fobia contra el MP con Thelma Aldana y la Cicig con Iván Velásquez; esa fobia se viene acrecentando por la denuncia contra el presidente por financiamiento electoral ilícito, ya comprobado, y reiterado por la nueva fiscal como por la posibilidad de que el presidente pueda perder la inmunidad, cuya acción se encuentra en trámite.
Y eso que aún falta por agregar lo que se rumora: que los migrantes guatemaltecos residentes en Estados Unidos le enviaron más de trescientos mil dólares para su campaña, que tampoco fueron declarados ante el Tribunal Electoral, y como cereza del pastel, los más de trescientos mil quetzales, que según lo ilustrado por la prensa, su hijo mayor se gastó disfrutando vacaciones en playas mexicanas a costillas del patrimonio nacional y de los impuestos de los guatemaltecos. Esas son pues, las principales razones químicamente personales que explican la fobia presidencial, en contra de la Cicig y su jefe Iván Velásquez.
Por cierto, en la nota enviada a Naciones Unidas, el presidente pide que sea designado un sucesor para sustituir a Iván Velásquez, tal vez pensando que funcionará la patraña de no dejarlo entrar al país; en tal sentido, no sería raro que, para sustituir a Iván Velásquez, el solicitante prefiera a uno de los jefes del «Pacto de Corruptos», para seguir solapando a los ídem enquistados en el Gobierno actual. Pero ya la ONU le respondió: Iván Velásquez sigue al frente de la Cicig, dirigiéndola desde el extranjero, en tanto se resuelve la situación.
Soy un profesional comprometido con la transparencia, la crítica y la propuesta, e identificado con los problemas sociales; los intereses y necesidades de los de a pie. / lufesaldy@hotmail.com