Para los que aún no conocen o no han escuchado de 48 Cantones, permítanme decirles que, es una organización comunitaria que nace en el seno de las comunidades indígenas del municipio de Totonicapán, su lema es precisamente “EL PODER DEL PUEBLO ESTÁ EN EL SERVICIO”, cada comunidad es representada por un Alcalde Comunal –en otra ocasión indicaba que, a lo largo de la historia se le estuvo dando varios nombres a la persona que representaba a cada comunidad, hoy es conocido como Alcalde Comunal-, de esa manera, los 48 Cantones se hacen representar por 5 Juntas Directivas, Alcaldes Comunales, Recursos Naturales, Agua Caliente y Alguaciles de primera y segunda quincena, cada junta directiva tiene su propio rol, sin embargo nadie debe ni tiene que ser más importante que las otras, es decir, nadie tiene que estar supeditada a nadie, la autoridad comunal se representa horizontalmente nunca verticalmente, para lo toma de decisiones debe prevalecer el bien común, jamás debe olvidarse las palabras de los ancestros cuando dijeron: NADIE SE QUEDE ATRÁS, SINO TODOS JUNTOS SE LEVANTEN. La autoridad comunal se visibiliza portando la vara, es decir, la vara simboliza esa autoridad que la asamblea comunal delega en su autoridad, sin embargo, yo diría que la Autoridad Comunal debe ser un estilo de vida, una persona con principios, con honestidad, con valores, con responsabilidad, recta y correcta, la vara siempre es recta.
Bueno, pero ¿porqué traigo esto a colación?, pues, lamentablemente como en toda organización sea esta mercantil, de beneficencia, social, cultural incluso religiosa, siempre hay y habrán problemas a lo interno de las organizaciones, y los problemas se dan precisamente porque tiene participación directa el ser humano. En el caso específico de 48 Cantones, los problemas se agudizan o profundizan cuando el ser humano que dirige, no tiene lo elemental, principios ni valores, se olvida de su responsabilidad comunal, en lugar de servir a su comunidad, se sirve de la comunidad. Desde hace algunos años hemos venido observando un comportamiento raro -por decirlo coloquialmente-, en la toma de decisiones por parte de la Junta directiva de Alcaldes Comunales, sus decisiones no son congruentes con las necesidades comunitarias, por ejemplo: En septiembre recién pasado, se acordó en cada comunidad salir a manifestar nuestro repudio a las acciones corruptas del gobierno de Jimmy Morales y los diputados, manifestar nuestro apoyo a las acciones contundentes a la lucha contra la corrupción e impunidad que está llevando a cabo la CICIG bajo la conducción del Sr. Iván Velásquez, dos cosas precisas y puntuales; sin embargo tremenda sorpresa nos llevamos cuando, en el pliego de peticiones entregadas por la Junta de Alcaldes Comunales a Jimmy Morales, se le daba prioridad a la no aceptación de semillas transgénicas y al alza a la energía eléctrica, comprometiéndose el gobierno instalar una mesa de negociación, hasta la fecha, aún estoy esperando la instalación de dicha mesa, si acaso habrá mesa estoy seguro que será una mesa servida por corruptos, con invitamos corruptos, tratando temas corruptos. Invito a todos, especialmente a los que hemos tenido la bendición de haber servido a nuestras comunidades, exigir una rendición de cuentas –no precisamente de dinero-, a las actuales autoridades comunales, reitero, especialmente a la Junta de Alcaldes Comunales, no es posible que la corrupción se enraíce dentro de la organización comunitaria más antigua de Guatemala.
Está en juego el bienestar o pobreza de nuestras futuras generaciones, Totonicapán no sale del letargo de la pobreza y desnutrición crónica, provocada precisamente por la desigualdad e injusticia heredada del colonialismo, dirigida por corruptos que utilizan a los politiqueros baratos, y ellos –los corruptos y politiqueros baratos- están usando a la Junta de Alcaldes Comunales para perpetuar este mal endémico.
Señor presidente de la Junta de Alcaldes Comunales, ¿se está dando cuenta de su responsabilidad? Usted no puede ni debe vender el bien común, por un plato de lentejas. Que Dios –el Ajaw, dirían nuestros ancestros-, le ilumine para que nos pueda dar una explicación detallada de sus actividades al frente de nuestra organización comunitaria.
Contador público y auditor, docente universitario y ex alcalde comunitario.