La ambición al poder y el deseo de querer pasar a la historia como los héroes más importantes en sus respectivos países es lo que hace que personajes como Putin y Consuelo Porras, estén empecinados en llevarse a quien se ponga en su camino, con tal de lograr sus fines. Ya lo decía Maquiavelo: para algunos, “el fin justifica los medios”. Putin le ha declarado la guerra a Ucrania, y Consuelo Porras le ha declarado la guerra a hombres y mujeres que se han caracterizado por ser honorables.
Los guatemaltecos tenemos que despertar del sueño. Hay que caer en la cuenta de que hay personajes diabólicos que han secuestrado la justicia en Guatemala y quieren copar todas las instituciones para taparse con la misma chamarra. Sólo en Guatemala tenemos una jefa del Ministerio Público a quien los Estados Unidos le ha cancelado la visa por corrupta. Y esta semana ha presentado su candidatura para ser reelecta para un período más. ¡Pero, qué cinismo! ¿Le conviene al gobierno continuar con una jefa del MP de este talante? Y los decanos de las universidades ya aprobaron su participación.
Ese deseo de venganza del MP se ve clarísimo en la actitud que ha asumido el juez Geisler Smaile Pérez, quien el jueves pasado, por razones de salud (diarrea posiblemente) no se presentó al juzgado para la primera declaración de Leily Santizo y Siomara Sosa. Este es un ejemplo de que en Guatemala también tenemos varios Putin, a quienes les vale madre la vida de estas dos mujeres honestas, con tal de quedar bien con quien les da las órdenes.
Lo que está pasando en el mundo y en Guatemala es una muestra de lo que pasa en algunas otras instituciones públicas y privadas, y hasta en grupos más pequeños. Es decir, existen varios Putin en grupos pequeños, que cuando se sienten descubiertos y amenazados, nos declaran la guerra. Son pequeños líderes con una autoestima por los suelos, la cual les convierte en imbéciles e idiotas. Bien afirma Arjona: hay “demasiados idiotas dirigiendo el mundo”. Yo diría que hay demasiados idiotas que le declaran la guerra a quien les dice la verdad en la cara.
¿En dónde se forma un buen líder? En una familia. ¿En dónde se forman líderes como Putin y Consuelo Porras? En una familia. ¡Ojo entonces! Si queremos lideres más humanos y menos idiotas, entonces hay que comenzar a educar en valores a los miembros de las familias. Rusia está asfixiando a Ucrania. El Ministerio Público de Guatemala está asfixiando a fiscales y jueces probos. Y algunos líderes de grupúsculos en nuestros pueblos y comunidades están asfixiando a quienes consideran un peligro para sus propios intereses.
Ojalá los guatemaltecos y guatemaltecas nos unamos, para que esta partida de bandidos no siga secuestrando lo poco de justicia que tenemos en Guatemala. Lo más importante es que cada guatemalteco levante la voz y exija que merecemos vivir en un país menos corruto y más más justo.
Como hombres y mujeres de fe, pidamos a Dios para que las guerras que algunos han iniciado, pronto desaparezcan de la faz de la tierra. En lugar de cultivar venganza y odio entre los seres humanos, cultivemos una cultura de paz y perdón, en donde todos podamos vivir en paz. Recordemos que debemos tratar a los demás como nosotros queremos ser tratados, porque con la misma medida con que midamos, seremos medidos, (Lc 6, 27-38).
Dios es el motor principal de mi vida, me gustan los retos. Soy amigo de la verdad y enemigo de la hipocresía.