En Guatemala los perseguidos, extorsionados, golpeados y amenazados somos los honrados y no los inútiles políticos, ladrones y corruptos. Se nos fue otro año…
Ya deberíamos de estar cansados de estar eligiendo a delincuentes para los puestos públicos que solamente con vivir en Guatemala nos damos cuenta que nos hace falta de todo. Un ejemplo de esta anarquía es simplemente andar en auto durante las lluvias es casi vivir el relato de la Biblia hebrea del Arca de Noé, en cualquier área del país las calles y carreteras se convierten en ríos, diluvio y caos. Este mes navideño , ya quisiéramos que cada quetzal que se recupere del bolsillo de los corruptos, lo invirtiéramos en seguridad, educación, salud, justicia e infraestructura pero como todo ya sabemos solo terminamos eligiendo a ladrones y todo el dinero robado desapareció como magia.
James Garfield dijo alguna vez que “la verdad te hará libre, aunque primero te hará miserable “Creo que esto aplica mucho para nuestro país, pero también siento que como guatemaltecos hemos perdido muchos valores. Todo es polémico parecemos más una sociedad con amnesia, estupidez y además que constantemente tratamos de evadir los problemas para nunca solucionarlos. Durante un curso de Economía en este año, la catedrática hizo la pregunta sobre si estábamos enterados sobre la información económica y sobre los aconteceres que salen a diario en los medios de comunicación escritos, radiales y televisivos. ¡Nadie dijo nada! Dos cosas quedaron claras una es que vivimos despreocupados de los desmadres que ocurren en el país y más preocupados por simplemente sobrevivir en él y la segunda es que nosotros que tenemos acceso a muchas fuentes de información que pasara con aquellos que no son tan afortunados. Mencionare esta frase que es la más adecuada hacia la ocasión “el gobierno no puede combatir la corrupción porque la corrupción es el gobierno”. En Guatemala hay corrupción, extorsión, violencia, controversia, indiferencia, silencio, frialdad, sufrimiento, estupidez, antivalores y hay de todo lo que uno se podría imaginar. Y ¡no se está haciendo nada al respecto! “Es más fácil destruir, que construir, y aún más fácil encontrar defectos que virtudes, el ser malo es más fácil que ser bueno…” Los años me han enseñado muchas cosas, entre ellas a madurar, a creer , a aprender, a desaprender, a confiar, a amar de corazón , sin apegos babosos, sin obstáculos en el camino creados en la mente por creencias infundidas , aprendiendo a ser feliz, libre y sin complejos, a saber soltar y a poder vivir. Y entonces solo queda en desearles una bendecida, exitosa, bella navidad y año nuevo 2019.