La primera Copa del Mundo celebrada en Oriente Medio y la primera disputada en un país de mayoría musulmana algún día será recordada por muchas cosas, pero por ahora no hay razón para mirar más allá de la épica final del domingo, que terminó con Lionel Messi finalmente levantando el 14- trofeo de la Copa del Mundo de oro macizo de una pulgada mientras los fuegos artificiales estallaban desde el techo de un estadio con capacidad para 89,000 asientos, iluminando el cielo nocturno.
Una Copa del Mundo que comenzó con una prohibición de cerveza terminó con un brindis con champán. Un torneo que comenzó con un llamado a la sensibilidad cultural terminó con la celebración de un ícono cultural.
Era el único premio que nunca había ganado Messi, considerado el mejor jugador de la historia del fútbol. “Lo hemos logrado”, dijo Messi, cuya celebración posterior al partido fue una mezcla de sonrisas y lágrimas. “No podríamos haber pedido más. ¿Qué puedo decir? Estábamos destinados a convertirnos en campeones del mundo y ahora lo somos”.
Ahora Messi tiene tantos mundiales como Maradona. “Es solo un partido de fútbol. La vida continua. Tus problemas seguirán ahí”, dijo el técnico argentino Lionel Scaloni. “Pero tal vez esto hará que la gente sea un poco más feliz. Logramos levantar este trofeo. Algo con lo que hemos estado soñando durante tanto tiempo”.
Esto aprendí del Mundial 2022, 1. Que Leo Messi necesitaba de todos sus compañeros para lograrlo, sin ver nuestras diferencias, sabiendo que todos jugamos para el mismo equipo. 2.La vida puede ser muy frágil y mucho más de lo que nos imaginamos. 3. Las emociones, si la pelota está en una posición determinada marca nuestro estado de ánimo.4. La manipulación, a veces es muy fácil, porque lo único que tendría que hacer es organizar un mundial de fútbol y con esto puede distraernos de nuestros problemas o realidad. 5. Somos seres humanos cien por ciento emocionales, si ganamos todos felices, si perdimos, todos tristes. De último no tengamos miedo, tengamos ganas.
Le quiero mencionar que a veces no pido mucho para Navidad solo que la persona que esté leyendo esto nunca le falte salud, comida y un hogar. Le contaré una pequeña historia cuando era niño, en esta época de Navidad, le preguntaba a mi madre “¿Qué quieres de regalo? Ella me decía, Salud y que no falta nadie el próximo año”. Yo le decía, “no mamita linda un regalo de verdad…”. Hoy me doy cuenta de la razón que tenía Doña María Elena, los regalos no son nada, si las sillas están vacías… ¡En memoria de los que ya nos adelantaron! Felices Fiestas y año nuevo 2023.