Debemos promover a Quetzaltenango con los atributos que aún conserva, su riqueza cultural, la amabilidad de su gente y la belleza arquitectónica, entre otros».
La eterna ciudad de Quetzaltenango sigue siendo una referencia en varios ámbitos, histórico, cultural, natural, arquitectónico, comercial, tradicional, educativo, económico. Una idea que seguro se mantendrá durante mucho tiempo, por eso es aplaudible cada acción que resalte los atributos de Xela y la promueva en el país o el extranjero.
El reconocimiento es aún mayor cuando las iniciativas son particulares, sin ánimo directo de lucro o porque les corresponda, como sí les compete a las instituciones encargadas de promover la ciudad.
Pero para que todos esos calificativos positivos de Quetzaltenango sean realidad, las autoridades municipales y de Gobierno tienen que generar las condiciones que concuerden con una ciudad en desarrollo, con seguridad, servicios de calidad, viabilidad y acceso; de lo contrario, todo lo bueno que se pueda decir será poco más que una leyenda. Para comprender cómo se debe actuar hay que volver a un principio fundamental, aplicable tanto a lo individual como a lo colectivo, siempre se tienen que cubrir primero las necesidades, subsanados los temas que son realmente necesarios para la población y la entidad, se puede pensar en proporcionar otros servicios y luego comodidades.
Quetzaltenango mágico, exposición fotográfica que estará instalada en el Museo de la Universidad de San Carlos (Musac) con motivo de su 24 aniversario, es literalmente una muestra de la belleza de la ciudad, y que se complementa como departamento con lo que representa y proyecta cada uno de sus municipios.
En general, la proyección que se pueda hacer de Xela es positiva, porque refuerza su importancia geopolítica y económica, a la vez que genera un atractivo para quienes aún no la visitan o quienes desean visitarla de nuevo, es decir, tiene un impacto en la promoción turística y en consecuencia en lo económico.
Las posibilidades para recordar cuáles son los atractivos de la ciudad son variadas, sobre todo ahora con las tecnologías digitales que llegan a millones de personas, pero también a través de otro tipo de eventos, y desde la condición individual de cada ciudadano quetzalteco.
Todo lo anterior tiene también una connotación nostálgica y de identidad local, que, sin embargo, no debe propiciar un desentendimiento de la realidad, por el contrario, ante la indiferencia de las autoridades, debe llevar a la exigencia de las mejoras que Quetzaltenango necesita, para ser un ciudad eterna y no una ciudad de eternos problemas.