En el libro de Jeremías capítulo treinta y dos, narra la parábola del terreno, y nos enseña a cómo poder movernos en bienes raíces. Para ello debes enfocarte en cinco principios para empezar la activación en los bienes raíces.
El primer principio consiste en que No importan las circunstancias. En Jeremías 32:2,3 nos muestra ese momento donde Jeremías estaba privado de libertad, atravesaba un momento indeseable, una circunstancia adversa. Pero nos muestra que una circunstancia difícil no debe detenernos para movernos en bienes raíces.
A partir de la crisis mundial debido a la pandemia del Covid-19, se empezaron a escuchar voces, que decían que la economía se comprimía, pero, aunque estés atravesando circunstancias difíciles, estas voces no determinan tu futuro, al contrario, no te preocupes por esas voces externas, no tengas miedo… ten fe. Las circunstancias difíciles no te dicen a dónde vas a llegar sino de dónde vas a empezar.
El segundo principio en Jeremías 32:6, nos muestra que, aunque las circunstancias en las que estemos atravesando sean adversas cuando viene una palabra de parte del Señor trastoca el presente, el destino, y el futuro, y viene a intervenir el tiempo de Dios en el tiempo del hombre. Esta palabra fue: “vas a comprarte un terreno”. Jeremías probablemente estaba esperando una palabra profética de libertad, pero el Señor le da una palabra profética financiera. Vendrá una temporada en la que podrás salir de compras, salir de compras no tiene nada de malo, la sabiduría debes aplicarla en eso que vas a comprar. No salgas a comprar cosas con minusvalía, sino sal a comprar cosas con plusvalía.
El tercer principio es que debes aprender a darle dirección a tu flujo de efectivo, Jeremías 32:10 dice que pagó el precio convenido que fueron diecisiete monedas de plata, Jeremías era un hombre prudente y sensato, con sabiduría financiera, que nos enseña a crear en nuestra vida una cultura de ahorro, de cuidar lo que llega a nuestras manos, de conservar algo de lo que llega a nuestros bolsillos. No importa cuánto ahorras sino el hábito de ahorro. Dales una buena dirección a tus ahorros. Direcciona tu flujo de efectivo hacia inmuebles, bienes raíces y la adquisición de tierras.
El cuarto principio nos enseña la Cultura de Compras al Contado, en Jeremías 32:25, nos enseña que Jeremías compró al contado. Hemos ido perdiendo en los países de Latinoamérica la política y la cultura de compras al contado, porque el sistema bancario de todos los países ha dado acceso al crédito fácil, inmediato y asequible. A través de las compras al contado tenemos tres beneficios: 1. No pagas intereses, 2. En el momento del desembolso se firma la escritura, se sella la escritura y se conserva la escritura, 3. No pierdes el sueño.
El quinto principio en Jeremías 32:15, nos revela que de nuevo volverán a comprarse casas, campos y viñedos, desde dos puntos: 1. Dios antes de bendecir a un pueblo, bendice a una persona para que el pueblo se active en fe, 2. El Señor nos da la palabra profética financiera en que nos moveremos en 3 factores: 1. Casas: que son esos terrenos para vivir, las casas son para la familia, 2. Campos: terrenos para invertir, Viñedos: terrenos para reinvertir.
Los cinco principios que nos enseña el profeta Jeremías es 1. No importan las circunstancias, 2. Viene una temporada en dónde saldremos a comprar tierra de parte del Señor, 3. Cultura de ahorro, 4. Cultura de compras al contado, 5. La palabra profética que necesitas es que volverás a comprar casas, campos y viñedos. El Señor quiere darte terrenos para vivir, para invertir y para reinvertir.