Hoy, 5 de junio, se celebra el aniversario número 185 de la autorización del Sexto Estado de Los Altos por parte del General José Francisco Morazán, quien en su papel de Presidente de la República Federal de Centroamérica dio luz verde a la creación de este territorio.
El Sexto Estado de Los Altos tuvo como capital a Quetzaltenango y estaba conformado por los actuales departamentos del Occidente de Guatemala: Quetzaltenango, San Marcos, Huehuetenango, Sololá, Totonicapán, Quiché, Mazatenango, Retalhuleu y el Soconusco Mexicano (Chiapas, México).
La creación de este estado se basó en la búsqueda de independencia y autonomía para la región de Los Altos, que desde la época colonial había sido un importante proveedor de materias primas para la Capitanía General de Santiago de los Caballeros de Guatemala. Sin embargo, la metrópoli no brindaba apoyo ni contribuía al progreso de la región, limitándose únicamente a explotarla y cargarla con impuestos constantes.
El 2 de febrero de 1838, los departamentos de Quetzaltenango, Huehuetenango, Quiché, San Marcos, Totonicapán, Mazatenango, Retalhuleu y el Soconusco Mexicano acordaron formar el Sexto Estado de la Federación Centroamericana o Los Altos. Este acuerdo se basó en el artículo 14 de la Constitución Federal de Centroamérica, que permitía la formación de un nuevo estado siempre que tuviera al menos 100 mil habitantes y que el estado del que se separara mantuviera una población igual.
Tras completar los trámites legales y obtener la autorización de José Francisco Morazán, el Sexto Estado de Los Altos se estableció oficialmente el 5 de junio de 1838. Posteriormente, el 16 de agosto de 1838, la Casa de Gobierno de las Provincias Unidas de Centroamérica emitió un decreto reconociendo plenamente al Sexto Estado.
Sin embargo, la existencia del Sexto Estado de Los Altos fue efímera. El 27 de enero de 1840, Rafael Carrera tomó el poder en el Estado de Guatemala y, sin declaración de guerra, llevó a cabo una represión brutal contra Los Altos. Saqueó y destruyó la ciudad de Quetzaltenango, confiscando la imprenta del Diario de Quetzaltenango y otros bienes. Además, ejecutó a los miembros de la Municipalidad de Quetzaltenango en la plaza pública.
Finalmente, el 29 de enero de 1849, se firmó un convenio en Antigua Guatemala que puso fin a la separación y reincorporó definitivamente los departamentos de Los Altos a la República de Guatemala.