En 48 días la firma de la Paz, firme y duradera cumplirá 25 años, algunos especialistas en política –guatemalteca por supuesto- consideran que a partir de dicha fecha, empieza la democracia en nuestro país, otros especialistas indican que fue a partir de la entrada en vigencia de la Constitución Política de la República de Guatemala -14 de enero 1986- hace más de 35 años; independientemente de las dos fechas, no cree usted, como que ya pasó bastante tiempo de dichos acontecimientos, sin embargo, hasta hoy, cuando ocurre algo “trascendental” para los políticos, suelen acuñar la frase, “nuestra incipiente democracia”, cuidado con tal o cual cosa, porque nuestro país aún tiene una democracia incipiente, así nos tienen desde hace varios años.
Cuando los políticos viejos y de turno dicen que la democracia se empezó a instaurar a partir de la firma de la Paz o a partir de la entrada en vigencia de la Constitución, están aceptando tácitamente que, antes de esos acontecimientos, vivíamos antidemocráticamente o mejor dicho, nos gobernaban antidemocráticamente, es decir, aquellas acciones en las que no se respeta la autoridad menos la soberanía del pueblo, se tiran a la basura las normas de libertad establecidas en el pacto político llamado Constitución Política de la República, tampoco se respeta la independencia de poderes, ejemplos clásicos son: fraudes electorales, la parcialidad o manipulación de los medios de comunicación, corrupción en todos los ámbitos del gobierno, la represión del gobierno, utilizando todo el aparato o fuerza pública –PNC, ejercito, grupos civiles pro gobierno-, etc., eso y mucho más fue el día a día de nuestros padres y abuelos; sin embargo, estimado lector, usted que está viviendo la era de la tecnología digital, que está casi por cumplir 21 años de vivir el siglo XXI, ¿no le parece que estamos igual o peor que la era antidemocrática?
El señor Giammattei, fue puesto como presidente por los de siempre, a todas luces por medio de un fraude electoral, los dueños –grandes corporaciones- de los medios de comunicación contratan periodistas y con ello manipulan y tergiversan al antojo del patrón, la información, el análisis objetivo de los acontecimientos, se han convertido solo en noticias, lejos quedó aquel slogan “La prensa, es el cuarto” haciendo alusión entre los tres poderes del Estado y la prensa, es decir, la prensa debe servir a los gobernados y no a los gobernantes, en este sentido, deseo que me acompañe en la lectura de ese tema, les dejo el enlace: https://www.elmira.es/opinion/jaime-nunez/la-prensa-debe-servir-a-los-gobernados-no-a-los-gobernantes/20181021095530137053.html.
En mayo de 1978, el gobierno utilizó toda su fuerza represiva contra campesinos del municipio de Panzós, Alta Verapaz, en esa ocasión murieron salvajemente más de doscientos campesinos en manos del ejército; en 1980 nuevamente la fuerza represiva del gobierno quema la embajada de España y con ello a más de 35 personas, la mayoría campesinos del área rural de Quiché, ambas masacres fueron perpetradas por el gobierno y fueron noticia en todo el mundo, hoy, en la era democrática, Otto Pérez Molina al frente del gobierno y con la participación del ejercito masacró a 7 comunitarios de 48 Cantones, cuando protestaban pacíficamente en el lugar conocido como Alaska.
Giammattei, utilizó al ejército –tierra y aire- para desalojar a campesinos que protestaban pacíficamente contra la actividad minera en el municipio de El Estor Izabal, a la fecha, dicho municipio está bajo Estado de Sitio, al gobierno le importa un pepino la resolución de la CC en la cual ordena a la empresa minera Fenix suspender toda actividad minera. Para variar, los medios de comunicación tradicionales, no se dan por enterados, esto, porque no quieren que se vea afectada la democracia incipiente de Guatemala.
El otro poder del Estado –Organismo Judicial-, sus integrantes -251 magistrados- llevan más de dos años en el cargo sin poder ser reemplazados, todo, por amaños y una serie de ilegalidades promovidas y apadrinadas por los de siempre. Qué viva nuestra incipiente democracia y por favor, no le hagamos daño, porque apenas lleva 25 o 35 años de vida.
En medio de la pandemia, corrupción, discriminación, desnutrición, desalojos, etc., que azota a Guatemala, la institución ancestral más antigua de Guatemala -48 Cantones- el pasado 6 de noviembre, eligió a sus nuevas autoridades que llevarán la responsabilidad de dirigirla en el año 2022.
Contador público y auditor, docente universitario y ex alcalde comunitario.