PUNTUAL
Algunos lo pueden calificar de extremista o radical, pero el presidente del vecino El Salvador, Nayib Bukele, está reconfigurando su país con unas justificaciones y argumentos que nos hacen pensar que tiene razón.
Anoche en su discurso de informe por cuatro años de gobierno, el mandatario salvadoreño dijo lo impensable: que reducirá los 262 municipios del país a tan solo 44. ¡Un gran susto para los vecinos que perderán su identidad y hasta arraigo territorial, pero no es solo un capricho! Dijo que le extrañaba que en un país tan pequeño hubiera tantos municipios, pero que esto no solo es organización territorial, sino que las municipalidades son unos de los principales focos de corrupción en el país. Igual que en Guatemala. Nadie lo puede negar.
Y, además, son una especie de parásitos porque solo viven del Estado y que no generan sus propios recursos. La mayoría de las municipalidades, tanto salvadoreñas como guatemaltecas, su presupuesto, casi el total, lo destinan a funcionamiento y no a inversión.
Por eso Bukele los mandará a volar y reorganizará el país geográficamente y en consecuencia administrativamente.
Somos países parecidos, con los mismos problemas y con el mismo cáncer de la corrupción que se mantiene y va en aumento.
El Salvador tiene una superficie de 21 mil kilómetros, con 262 municipios, donde hay 7 millones de habitantes; mientras que Guatemala tiene una superficie de 108 mil kilómetros, 340 municipios y 17 millones de habitantes. El Salvador tiene 14 departamentos y Guatemala 22.
¡Qué tal sería reorganizar Guatemala! Porque mientras más grande es el aparato estatal más lento y corrupto se vuelve. Es un monstruo de mil tentáculos y más fácil se vuelve su control, administración y fiscalización.
Al presidente salvadoreño el tiempo le dará la razón, pero desde ya tiene algo a su favor: y son sus argumentos para hacer los cambios.
Lo mismo con el número de diputados, que de 84 pasarán a ser solo 60, con la nueva propuesta de Bukele. En Guatemala hay 160 diputados, de ellos, 32 son por listado nacional. Estos últimos deberían ser eliminados del sistema. Peor con los diputados del Parlacen que están solo para engrosar la corrupción.
¡Soñemos con una Guatemala distinta, un día será posible!
Licenciado en Ciencias de la Comunicación, con tres maestrías en diferentes campos y Doctor en Investigación en Educación. CEO de La Voz de Xela, conferencista nacional e internacional y profesor universitario.