Ya todo regreso a la normalidad….

Pero no las ganas de vivir…

Los parásitos cumplen funciones importantes en la ecología.  Y además regulan directamente los tamaños poblaciones de las especies a las que infectan a través de la mortalidad de los individuos. Ahora tenemos al gran parasito que se llama gobierno de Guatemala cuyo fin último es hacer de Guatemala lo que es ahora desmadre, cuyas decisiones hubieran perdido en grados a seres humanos. Acabo de cumplir 45 años de vida y estoy tan decepcionado de un país que ni a un Mundial llegaremos y solo a morirnos a una esquina porque simplemente tenemos a cada sinvergüenza.

Mueren los parásitos después de robarse millones y simplemente lo heredan a otro que ya va en camino. La mera verdad que inútiles se han convertido toda esta bola de “burrocratas” vividoras de nuestros impuestos y aun así nos están matando de muchas formas. Antes en la normalidad de las cosas la inseguridad nos mataba, una relación incapaz demostrar amor también. Y en fin de cosas. Ahora la pandemia nos puede matar porque simplemente puedes ser portador y también transmisor, pero tienes tan buenos genes que solo eres portador. ¿Qué nos espera después de la pandemia?  Creo una vida en solitario y con grandes cambios al mundo. 

A pesar del creciente número de casos, su mayoría de los infectados sufre síntomas leves y se recupera. Este mal no va desaparecer porque es peor que la gran corrupción que vivimos a diario en el país. Todos ahora desconocidos y disfrazados, ya no recocemos a los malos y los buenos, nunca es tarde para emprender un nuevo rumbo vivir una nueva historia o construir un nuevo sueño. Pero realmente con tanto sinvergüenza solo nos queda tratar de vivir un nuevo sueño entre tanta maldad. 

Antes del coronavirus, en el mundo y Guatemala padecimos “Gripe española”, Sarampión, la peste bubónica, plagas, la cólera morbus, la fiebre amarilla, el tifo epidémico —transmitido por piojos— y, aproximadamente 1520, la viruela. La ultima enfermedad que más recuerdo fue del Chikungunya que se transmitía por mosquitos. Tenemos muchísima literatura que habla al respecto. Y ahora tenemos mucha información como avances científicos y tecnológicos, pero en este entorno que vivimos los guatemaltecos es más frágil caer en la enfermedad porque cada gobernante que hemos tenido todo se lo roban.

Todas las áreas que representa a un “servidor público” carecen de infraestructura, inteligencia y sobre todo servicio. Imagínese te acabas de enfermar del COVID19 y ahora no hay espacio, ya eres paciente y además tienes que comprar los medicamentos. Después de cuatro meses los tales hospitales temporales y todo lo relacionado con este gobierno sigue funcionando con carencias graves y los pacientes se siguen muriendo. 

No me gusta este gobierno asqueroso, si ya saben cómo me pongo no quiero ser reconocido como chapín entre tantos sinvergüenzas. El resultado al final del día es una lata. Hoy quería ir a comprarme un pastel para estos tiempos de cumpleaños en tiempos de pandemia, pero resulto que el lugar ya lo cerraron, ahogados por la crisis. El peor dolor no es el que mata, sino el que te quita las ganas de vivir…