Además del intenso y tedioso tráfico que está imperando en la ciudad en los últimos días, existe un total descontrol en lo que se refiere a los negocios que se dedican a la reparación de vehículos, lo que está generando aún más caos incluso en calles y avenidas alejadas donde no se puede transitar caminando porque ya no se deja espacio para los vehículos ni para peatones.
Desde hace varios años se normó que si algún ciudadano va a tener a su cargo el negocio de mecánica automotriz debe de contar con un local con espacio suficiente en donde pueda realizar sus labores, sin embargo nadie supervisa que realmente se este cumpliendo con ello, y a la fecha podemos observar en calles y avenidas que existen talleres que realizan sus labores en la vía pública obstaculizando el paso, además generan contaminación auditiva y en muchos casos generan monóxido de carbono derivado de las pruebas que realizan con los vehículos que reparan.
La policía municipal de tránsito es la llamada a verificar y sancionar a los propietarios de talleres mecánicos, de enderezado y pintura, aceiteras, pinchazos, ventas de repuestos o a cualquier tipo de negocio que este utilizado la vía pública para realizar tales trabajos, pero cada vez son más los espacios públicos ocupados también por otro tipo de negocios sin que las autoridades actúen.
Es importante también que se liberen las vías, porque además de que estas se encuentran obstaculizadas por negocios informales que no tributan impuestos solo pagan piso de plaza a la municipalidad, también los vehículos particulares se estacionan en cualquier lugar, incluso en esquinas sin respetar el distanciamiento pertinente para que los otros vehículos puedan cruzar, esto puede verificarse en la zona 1 por la plazuela San Antonio, alrededores de la escuela esteban Figueroa o salida de Almolonga entre otros.
El ejemplo debe empezar por las autoridades, pero cada vez aumenta el número de vehículos que acumula la Policía Nacional Civil, ya tiene totalmente desordenadas y ocupadas con vehículos chatarra los alrededores del mercado las flores, y ahora está acumulando vehículos en la avenida las Américas en los alrededores de la escuela de Pacajá, lo cual genera delincuencia y mal aspecto especialmente se está convirtiendo en un lugar peligros para los niños y jóvenes que estudian en ese centro educativo. Estos problemas van creciendo, se hacen grandes y se van sumando a los otros que generan invasión a los espacios públicos y transitables para peatones y vehículos en la ciudad, si esos vehículos acumulados son inservibles o abandonados en las calles y avenidas de Quetzaltenango deben ser enviados a un predio, a la capital o a otra propiedad de la PNC en donde exista el espacio y no generen malestar ni contaminación en la ciudad. Además los vecinos deben organizarse para evitar que cualquier calle o avenida sea invadida y se pierda el derecho a la libre locomoción garantizada en la Constitución Política de la República de Guatemala.