Como todos sabemos, los derrumbes suscitados en el famoso libramiento de Chimaltenango, -la mayor obra realizada en Centroamérica- según palabras de Jimmy Morales, cuando procedió a su inauguración el 12 de abril del presente año, a un costo que ronda los 500 millones de quetzales, han interrumpido la “paz” del señor presidente al punto de echarle la culpa a la publicidad que se le ha hecho, para él y para el ministro de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda, los derrumbes son normal en el país –palabras más, palabras menos-.
Sin embargo, el ministro del CIV no pudo encontrar otra respuesta más coherente debido a que, el efecto de la corrupción es palpable, contundente e inevitable su responsabilidad, toda vez que, se supone, es experto en el ramo de la ingeniería, es conocedor de la topografía y características especiales del suelo, de ese tramo en específico, pero su ignorancia y amor al dinero fácil, lo llevó a decir que, “la obra aún no ha sido inaugurada”, a la chucha, ¿qué cree él, que somos tontos?
Señores corruptos, para tranquilidad de ustedes, no es solo el libramiento de Chimaltenango, hay varios y varios tramos carreteros que desnudan la realidad corruptela del gobierno actual y de hace más de 25 años, es decir, desde hace mucho rato, vienen desplumando el erario nacional.
Uno de esos tramos carreteros es precisamente de Cuatro Caminos San Cristóbal Totonicapán hacia Santa Eulalia –Ruta Los Cuchumatanes-. En una carretera construida con estándares normales y con mantenimiento acorde a las necesidades y sobre todo sin corrupción, el tiempo máximo de viaje, sería de tres horas, por supuesto con paradas obligadas para contemplar el paisaje hermoso que nos ofrece la naturaleza. Pero la realidad es otra, los hoyos, baches, etc., empiezan precisamente en Cuatro Caminos, San Cristóbal Totonicapán hasta llegar al lugar conocido como Pologua, San Fracisco El Alto, el calvario vehicular reinicia nuevamente en Malacatancito, Huehuetenango hasta llegar a Santa Eulalia. El tiempo recorrido con corrupción, es de seis horas.
Casi todo el tramo carretero es intransitable, por ejemplo, desde el lugar conocido como Paquix hasta llegar a San Juan Ixcoy. El testimonio de los habitantes dan cuenta que, ese tramo carretero ya fue inaugurado más de dos veces, pero en papeles y además indican que, de nada sirvió la protesta realizada en Cuatro Caminos, San Cristóbal Totoncapán, hace unos meses atrás, porque, Jimmy Morales no cumplió con su palabra. Cómo creerle al presidente más mentiroso que hemos tenido. Una mancha más al tigre, no tiene consecuencia.
Como sabemos, el problema es del sistema corrupto que nos han impuesto, por ejemplo: En las elecciones de septiembre 2015, por el departamento de Huehuetenango, fueron “elegidos” diez diputados, de ellos, ocho fueron reelegidos y tres de ellos, en ese momento, enfrentaban procesos judiciales. Joel Rubén Martínez, lo hacía por cuarta vez, Mirza Arreaga, por tercera vez, Luis Chávez Pérez y Sofía Hernández Herrera por segunda vez, Julio Cesar López Villatoro por cuarta vez, Maura Guzmán Mérida por tercera vez, Emilene Aquino Mazariegos tercera vez, Sandra Ester Cruz, dos veces.
En el proceso eleccionario recién finalizado –Junio 2019- solamente tres fueron reelegidos, el señor Joel Rubén Martínez, irá por su quinto período legislativo, mientras que Cornelio Gonzalo García y Walter Rolando Félix, estarán por segundo período consecutivo.
Es inaudito, han sido millones y millones de quetzales los que la corrupción ha robado del erario nacional, han sido más de 25 años sufridos por los habitantes de esa región. Pregunto: ¿Sr. Joel Rubén Martinez, Cornelio Gonzalo García y Walter Rolando Félix, cuántos años más necesitarán como diputados, para pedir que el MICIVI asfalte la carretera de los municipios al cual ustedes representan?
Anécdota: De Santa Eulalia, le dimos jalón al Sr. Juan Francisco y su esposa, quien precisamente la esposa venía a una cita al IGSS, al llegar al Mirador, exclamó: “Ya salimos del calvario”.
Contador público y auditor, docente universitario y ex alcalde comunitario.