La OIM –Organización Internacional para las Migraciones- define en el Glosario sobre Migración que la Migración Espontanea es el “Movimiento de personas o grupo de personas que inician y realizan sus planes de migración, sin asistencia. Por lo general, esta migración es causada por factores negativos en el país de origen y por factores atractivos en el país de acogida; se caracteriza por la ausencia de asistencia del Estado o de cualquiera otro tipo de asistencia nacional o internacional”. En general éste tipo de migración se da como respuesta al instinto de sobrevivencia.
En Guatemala como es de conocimiento general el gobierno tuvo y tiene serios problemas para diseñar y cumplir con un plan presentado a inicios del presente año para inmunizar a la población contra el virus del Covid-19 por medio de la vacuna.
Dentro de los factores más graves se puede mencionar el contrato millonario que nuestro país firmó con un intermediario para la adquisición de 8 millones de vacunas con Rusia, un contrato lesivo, que causa menoscabo a los intereses del Estado de Guatemala y que no cumplió con los procedimientos de velar por la calidad del gasto público, fianzas ni garantías en el producto. La compra se hizo con fondos públicos y se pagó el 100% del monto de la negociación por adelantado sin garantizar la entrega de las vacunas.
Lo anterior, desencadeno una serie de demandas sociales ya que debido a la falta de vacunación Guatemala se sitúa entre los países que han vacunado a un porcentaje bajo de su población, como consecuencia han enfermado y fallecido muchas personas que habrían podido salvarse si hubieran sido vacunadas a tiempo.
Gracias a países como Estados Unidos y la cooperación internacional, se está iniciando con la vacunación, pero solo urbana, falta el área rural, los jóvenes que diariamente trabajan en supermercados, gasolineras, bancos, entre otros, que no han dejado de laborar durante todo el tiempo de la pandemia.
Otro factor detonante es la discrecionalidad en la aplicación de la vacuna, no se ha respetado el orden del plan, los hospitales nacionales no tienen presupuesto ni insumos, están saturados y los privados están en su máxima capacidad de atención a pacientes.
Ante la desesperación y desconcierto de la de la población el instinto de sobrevivencia hizo que los ciudadanos que pagan sus impuestos y que tenían derecho a la vacuna que pago el gobierno buscaran otras alternativas para vacunarse.
Y se dio lugar a la migración espontanea, porque muchos connacionales ante la ineficiencia en el manejo de la pandemia migraron a vacunarse a países como México, El Salvador y Estados Unidos. Esto es una muestra de las causas de la migración irregular, quienes tienen el poder adquisitivo migraron por la vacuna, pero el origen es la corrupción y la ausencia de Estado. Existen personas que se ven obligadas a migrar por las mismas razones pero para buscar trabajo, salud o estudios, porque aquí en su país no existen esas oportunidades para ellos.