Mientras tanto en El Salvador y Argentina van por el buen camino resolviendo, solucionando y no robando descaradamente como en nuestro país. Aquí estamos criándonos Mientras tanto en El Salvador y Argentina van por el buen camino, resolviendo, solucionando y no robando descaradamente como en nuestro país. Aquí estamos criándonos como cuyos, pero a veces no me gusta recomendar lectura porque si no aplicamos en la vida real lo que leemos entonces será en vano leer; muy parecido a los que le pasó al pueblo colombiano que se conocían mucho por su “lectura”, pero solamente leían “porquería”, ya que terminaron eligiendo a Pietro ex guerrillero que dejara al país más en la miseria como el nuestro, mucho rezamos y leemos poco, terminamos siendo un regalo para el político haciendo de un montón de hijos de la gran chingada con un pueblo muy fácil de engañar.
Aquí le va el primero: “Cómo Criar Hijos Y Que No Salgan Imbéciles”, Libro es de Melinda Wenner Moyer y simplemente es lograr que tus hijos se conviertan en personas con las que quieras pasar tiempo de verdad y a la vez que no sean imbéciles como es Miguel Pito (la primera dama de la Nación en Guate), Osman Alexander López Rivera de grafitero a millonario o los cuatro hijos de la desaparecida Sandra Torres, quienes ganaron puestos populares de elección para este 2024-2028.
Pocos son los libros que nos enseñan tanto sobre la vida como “Siddhartha”, el autor es Hermann Hesse, ganador del premio nobel de literatura y que simplifica que las acciones son las que hacen a un buen ser humano no en sus palabras que terminan siendo mentiras al final. Estos dos libros son joyas en letras.
En estas fechas queda claro que es cuando más se alborota la hipocresía solamente con recordar la película del Grinch, él no odiaba la navidad, sino que odiaba la hipocresía de la gente. Además, antes se burlaban de los niños que creen en Santa Claus, ahora tenemos que recordar a muchos que hay adultos que aún creen en el socialismo.
Yo al final no quiero venganza de todo lo que en general ocurre en Guatemala, yo lo que quiero es paz y estar orgulloso de ser chapín. Yo no escogí nacer en Guatemala, ni logré escoger la familia cuando nací y a veces las peores puñaladas, las traiciones y la envidia vienen de la propia familia, pero al final todos quienes traicionan son ellos que pierden mucho más y sin que se hayan dado cuenta o terminan simplemente desapareciendo poco a poco. La vida es como mi madre: Hermosa, pero por ratos me pegaba con la chancleta. Y ahora una nueva variante del Covid-19 y sin hospitales, vacunas y todo más caro, debido a que este gobierno, como todos, se lo robaron y lo más triste es que nunca lo devuelven.
Entonces el 31 a la media noche les voy a desear a todos un hermoso año nuevo porque feliz no lo estoy y si sigo viviendo en Guate creo estaré condenado aún más, pero bueno esperemos un buen año sin tristezas, sin angustias, muchos viajes más, salud, un buen trabajo, muchísimo amor y buenas vibras a mí, a vos y a todo aquel que lea mi columna. Y recuerde que el rival más difícil está en tu cabeza.