Es inaudito la poca o casi nula vergüenza que tiene el señor Felipe Alejos –diputado del bloque TODOS-, al seguir insistiendo en la expulsión de los médicos cubanos del territorio guatemalteco.
Felipe Alejos, es un fiel guardián u obediente peón de los que creen que nuestro país es su finca, y en esa embriaguez tonta hacia sus patrones, dice cosas estúpidas que solo a él se le ocurre, bueno, quizá es la misma experiencia o las mismas acciones que él y el pacto de corruptos ha llegado a hacer en casos “especiales” –movilizar grandes cantidades de dinero en efectivo de un apartamento a otro-, estimado lector, le recuerdo que hace exactamente dos años -08-09-2018- la señora Aneliese Herrera ex asistente de Alejandro Sinibaldi relataba ante el Juez, la forma en que los corruptos de cuello blanco, escondían 100 millones de quetzales en efectivo, llevándolos de un apartamento a otro.
Por qué traigo a colación esta manera criminal en que operan los corruptos en Guatemala, pues, porque el día 1 de septiembre Felipe Alejos, citó a la ministra de Salud y en una de sus intervenciones dijo que, en el avión que conducía una vez al año a los médicos cubanos a su país de origen, presume él –Alejos- es trasladado el 70% del salario pagado a los médicos para el régimen cubano. Al diputado Alejos, le queda como anillo al dedo el refrán, el león juzga por su condición.
Como he dicho en otras ocasiones, hay que reconocer las actitudes y trabajos correctos de las personas y en este caso, la señora ministra sin ningún titubeo le dijo a Alejos, de frente y mirándole a los ojos, que los médicos cubanos hacen una función extraordinaria.
En otra de las intervenciones de la señora ministra –siempre con diputados-, dijo rotunda y categóricamente que la brigada de médicos cubanos no pueden ser sustituidos por otros especialistas guatemaltecos, simple y sencillamente porque, ellos –los cubanos-, se adentran a laborar en áreas lejanas. En ese sentido, el gobierno por medio de la ministra de Salud, está reconociendo que, el Estado por medio de personal guatemalteco, jamás se ha preocupado por los habitantes de esas áreas lejanas.
La pregunta del millón es, ¿dónde quedan esas áreas lejanas?, o en todo caso, áreas lejanas, ¿para quién? El gobierno de Guatemala está aceptando tácitamente que no está cumpliendo con el mandato constitucional plasmado en los primeros tres artículos, los que transcribo literalmente: “Artículo 1.- Protección a la Persona. El Estado de Guatemala se organiza para proteger a la persona y a la familia; su fin supremo es la realización del bien común. Artículo 2.- Deberes del Estado. Es deber del Estado garantizarle a los habitantes de la República la vida, la libertad, la justicia, la seguridad, la paz y el desarrollo integral de la persona. Artículo 3.- Derecho a la vida. El estado garantiza y protege la vida humana desde su concepción, así como la integridad y la seguridad de la persona.”
Qué pena que el Estado nunca haya llegado a proteger la vida de las personas en esas “áreas lejanas”, sin embargo, cuando se trata de cobrar impuestos, la SAT jamás escatima esfuerzos para entregar requerimientos de información tributaria a los micro comerciantes de esas “áreas lejanas”, lo digo con conocimiento de causa.
Reitero, lo dicho por el gobierno a través de la ministra de salud, debe ser analizado por las organizaciones especializadas en derechos humanos, porque, solo Dios sabe, cuántas personas han fallecido por falta de atención médica; atención médica que surge por desnutrición, etc., acaso dicho “descuido” del gobierno no se podría catalogar como crimen de lesa humanidad.El reconocimiento a la labor de la brigada médica cubana, ojalá no le traiga consecuencias lamentables a la señora Ministra de Salud Pública y Asistencia Social, es decir, que le den las gracias por sus servicios a la patria y que la vinculen con comunistas.
Contador público y auditor, docente universitario y ex alcalde comunitario.