TERRITORIO ECONÓMICO
Los zapateros, el sastre, la modista y el carpintero entre otros, están a punto de desaparecer. ¿Esto conviene en lo económico y social?
Este artículo de opinión lo escribí hace ya más de cinco años. Luego de publicarse recibí comentarios positivos, todos encaminados a validar la idea de regresar cuatro décadas y volver a consumir productos elaborados en la localidad, lo reproduzco convencido de que lo dicho lleva el propósito de valorar a los maestros que ejercen oficios todos los días, y sin los que la vida no sería igual. Aprovecho para incluir la reflexión que he venido haciendo en estos espacios, es mejor comprar los productos alimenticios en los mercados, porque ayudamos al pequeño productos a sobrevivir.
En los años setenta recuerdo que era muy común que los guatemaltecos adquiriéramos productos con: zapateros, sastres, modistas y carpinteros, verdaderos artistas y profesionales en su ramo. Los bienes que comprábamos tenían varias ventajas: el precio, la calidad, la duración y la posibilidad de una reparación eran las más apreciadas, en aquellos días no se le daba importancia a otra que hoy, sí, la conservación del medio ambiente. Hoy encontrar a alguien que repare un par de zapatos es sumamente difícil, los sastres tienen menos clientes, el carpintero y la modista ni se digan, esto debido a que ya no hay consumidores que requieran estos y otros servicios.
En una economía globalizada como la que hoy tenemos es fácil encontrar zapatos fabricados en Asia, así como ternos y muebles de madera provenientes de diferentes partes del mundo, a un precio competitivo, sin embargo adquirirlos puede tener diferentes efectos en la economía, positivos y negativos. No se ha reflexionado sobre los impactos negativos, tales como desempleo, pero sobre todo el daño al medio ambiente.
En la actualidad encontramos en los diferentes mercados del país una gran cantidad de bienes, como ropa, zapatos y muebles elaborados con productos sintéticos, cuya característica principal es que son desechables, por ende el aumento en la cantidad de toneladas de basura es impresionante, vamos a llegar a un momento en el que viviremos inundados de basura, a pesar de que existen grupos ambientalistas que luchan por buscar alternativas que minimicen el impacto al medio ambiente, lo que se ha convertido para ellos en una tarea imposible. No disminuirá el daño ambiental si seguimos utilizando bienes desechables, como ropa, zapatos, entre otros.
Por las razones citadas anteriormente, pero sobretodo por una vida mejor debemos regresar cuatro décadas atrás y volver a utilizar los servicios de aquellos dignos maestros que se dedicaban a los diferentes oficios, además de obtener beneficios como calidad del producto, exclusividad y otros, estaremos apoyando la economía de miles de guatemaltecos, seguramente tendríamos menores daños ecológicos, en lo social disminuiría la migración, la delincuencia, y sería una fuente digna de empleo. En esta era de modernidad debemos combinar los avances tecnológicos e industriales con formas de vivir más armoniosas, beneficiosas para todos y dejar de ser una sociedad sumida en el consumo y las marcas transnacionales.
Profesor universitario, académico, profesional de las Ciencias Económicas.