En temporada de crisis José el Estratega les dijo a sus hermanos que antes de presentarse ante el Faraón debían prepararse, porque él les haría algunas preguntas. Y cuando llega el momento de presentarse frente al Faraón, él les preguntó: “¿En qué trabajan ustedes?”, por lo que los hermanos de José, debido a esa preparación respondieron: “Nosotros, sus siervos, somos pastores, al igual que nuestros antepasados.”
Esa respuesta de los hermanos de José de: “somos pastores” atrajo el interés del Faraón, porque en esa temporada un pastor era una persona ocupada, una persona con capacidades, responsable, cuidadosa, talentosa y leal. Por lo que sigue diciendo el Faraón a José: Y, si sabes que hay entre ellos hombres capaces, ponlos a cargo de mi propio ganado; primero: debes relacionarte con los José de estos tiempos para que esa relación te lleve a los Faraones de hoy en día.
Segundo: la capacidad es la que te dará la oportunidad. Esa oportunidad llegará a tu vida no porque la necesites sino porque tus capacidades, tus habilidades y tu potencial son los que te llevarán hacia esa oportunidad. Tercero: un hombre como Faraón, puede confiarte parte de sus riquezas cuando ve en ti una persona capaz.
Así que empieza a provocar momentos para relacionarte con un José. Cambia tu mentalidad y no operes por necesidad, no te muevas porque necesitas algo, hazlo porque quieres una oportunidad.
Una oportunidad fue lo que llevó a los hermanos de José hacia el Faraón, y su capacidad fue la que hizo que el Faraón les confiara de sus recursos, de sus riquezas. Fue una oportunidad la que llevó a los hermanos de José a activarse en bienes raíces, fue esa oportunidad la que les dio una nueva esperanza en su vida. Una oportunidad puede posicionarte en ese lugar de Reino que el Señor tiene para ti, solo tienes que moverte en relaciones, entrenar tus capacidades, y ser una persona confiable.