REALIDADES
El flagelo de la corrupción, -en nuestro país-, pareciera que fuese una competencia entre los diferentes gobiernos que han desfilado en la era democrática.
Ahora, que recientemente la Organización Transparencia Internacional, diera a conocer que nuestro país ocupa uno de los primeros lugares en el Índice de Percepción de Corrupción, se me viene a la mente un chiste que escuché hace años, con motivo de la celebración del Día Internacional de la Alfabetización, que, parafraseado a mi manera, lo narraban así: El Coordinador o Autoridad Regional del Comité Nacional de Alfabetización, CONALFA, en el momento de su discurso, expresa, es lamentable que nuestro país ocupa el segundo lugar en analfabetismo, sólo superamos a Haití. Cuando le otorgan la palabra a la Señorita Alfabetización, expresa, así como dijo el Coordinador, que lamentablemente ocupamos el segundo lugar, pero, yo, como señorita Alfabetización realizaré mis mejores esfuerzos para que el otro año no estemos ocupando el segundo lugar sino el primer lugar.
Pareciera que el contenido de este chiste lo están practicando los presidentes de los diferentes gobiernos que han desgobernado nuestro país. Veamos algunos datos sobre el Índice de Percepción de Corrupción publicado por la Organización Transparencia Internacional: (Prensa Libre, 30-01-2019, p. 03). “Año 2012, puesto 113, calificación 33. Año 2013, puesto 123, calificación 29. Año 2014, puesto 115, calificación, 32. Año 2015, puesto 123, calificación 28. Año 2016, puesto 136, calificación 28. Año 2017, puesto 143, calificación 28. Año 2018, puesto, 144, calificación 27.” De acuerdo a estos datos, el gobierno más corrupto es el actual gobierno encabezado por Jimmy Morales, y, agregaríamos los guatemaltecos, el más irrespetuoso a la institucionalidad y legalidad del país. Lamentable, por él y por el país porque cuando se disfrazaba de blac pitaya, narraba bonitas moralejas.
Ahora bien ¿Cuáles son los efectos de la corrupción? En el mismo documento consultado para la fundamentación de los anteriores artículos, se señala: “Cada semana al menos un periodista es asesinado en un país altamente corrupto. El análisis, que incorpora datos del Comité para la Protección de Periodistas, muestra que de todos los periodistas que fueron asesinados en los últimos seis años, más de 9 de cada 10 fueron asesinados en países con una puntuación de 45 o menos en el índice.
Ningún activista o reportero debería tener que temer por sus vidas cuando habla contra la corrupción. Dada la represión actual tanto en la sociedad civil como en los medios de comunicación de todo el mundo, debemos hacer más para proteger a quienes hablan. Patricia Moreira Directora General de Transparencia Internacional.
Los resultados del IPC se relacionan no solo con los ataques a la libertad de prensa y la reducción del espacio para las organizaciones de la sociedad civil. De hecho, lo que está en juego es la esencia misma de la democracia y la libertad. Delia Ferreira Rubio Silla Transparencia Internacional.
Ante esta voracidad por el enriquecimiento ilícito y la falta de práctica de valores éticos y morales, los guatemaltecos debemos reaccionar eligiendo a hombres y mujeres probos y capaces para que dirijan los destinos del país. Recordemos lo que señalara Pepe Mujica: La política no es para enriquecerse es servicio al pueblo.