La semana pasada compartí mi columna con un grupo de profesores universitarios, en ella relaté la situación de la corrupción en nuestro país, relacionada con el precio del gas. Un colega me compartió una historia escrita por un anónimo, en ella se relata como Dios luego de escuchar las oraciones de los guatemaltecos envía a Jesús al país para combatir a los corruptos, luego de unos años regresa, sin haber cumplido los deseos del ser supremo, porque prácticamente se llenaron las cárceles, y la mayoría de ciudadanos son corruptos, el relato es mucho más extenso, acá hice una síntesis. La idea central era dejar claro que muchos han cometido por lo menos un acto de corrupción. Entregar dinero a un policía por no llevar la licencia, estacionarse en un lugar prohibido, ingresar productos para consumo o subsistencia de contrabando, usar influencias o pagar para un tramite municipal, son algunos ejemplos. El espíritu del mensaje es que, sí un ciudadano común no esta dispuesto a dejar esas prácticas corruptas, porque pide a los gobernantes que lo hagan.
Esta estrategia de acusar a todos de corruptos, por pequeños actos realizados alguna vez en su vida, para justificar los Q30 mil millones de quetzales que se pierden en el presupuesto nacional en corrupción, es creada por los políticos, y que sus peones replican de mil formas.
Si usted alguna vez a caído en las redes de la corrupción, pagando favores, no es porque usted sea corrupto, es porque el sistema esta gobernado por corruptos y a ellos les conviene que usted se sienta culpable.
Algunos dicen, pero si usted en su pequeño negocio altero alguna factura, o bien dejo de facturar y pagar impuestos, por eso los gobernantes lo hacen. Esto hay que revertirlo, si un pequeño comerciante usa la corrupción, esto se debe a que no tiene otra opción, sin embargo el Presidente, los Diputados, Magistrados de la Corte Suprema y de la Corte de Constitucionalidad, así como Ministros, y todo tipo de funcionario de alto rango, ello pueden tomar otro camino, el correcto, dejar atrás la corrupción y establecer mecanismos para que desde la cabeza, vaya bajando una cultura de transparencia, en la que pasemos por la clase alta, media, baja y pobre, minimizando el flageló de la corrupción.
Hay un viejo refrán que reza: “explicación no pedida, culpabilidad aceptada”, este le queda muy bien al presidente Giammattei, él esta semana en Estados Unidos, afirmó que el narco tráfico es uno de los causantes del fenómeno de la corrupción, lo cual es verdad, pero no es el único, la avaricia juega un papel predominante en el ámbito nacional. Son muchos los casos en donde roban miles de millones, dinero que serán incapaces de gastarse el resto de su vida, y el presidente es un claro ejemplo de ello. El caso de la alfombra rusa en casa de él nunca se aclaro, ni se aclarará. También culpo al cambio climático, dice que este fenómeno es el causante de la migración, lo cual es falso, con los Q30 mil millones se pueden crear miles de plazas de empleo. Los más de cuarenta hermanos muertos ayer en México en su trayecto al sueño americano, son otro resultado de la corrupción.
Ayer se conmemoro el día internacional contra la corrupción, fue realmente preocupante ver en el palacio nacional a personalidades importantes, obligadas a combatir este mal, buscando eliminar la impunidad, sin embargo no tiene las calidades mínimas para hacerlo, como es el caso de la Fiscal General del Ministerio Público, la cuestionada profesional del Derecho, que ostenta el grado de Doctora, sin en verdad serlo, con una tesis que fue copiada, de otra, que corresponde a un graduado de licenciatura. Así también el señor Contralor General, quien dice ser Doctor, pero no figura su nombre en ninguna universidad en donde haya obtenido dicho titulo, esto según los medios de comunicación. Como vemos, quienes deben poner el ejemplo de cero corrupción no están dispuestos a hacerlo, al contrario simular tener grados académicos para engañar a sus electores y llegar a esos cargos. Desafortunadamente son muchos los ejemplos, como los magistrados del tribunal supremo electoral. Sí en 2019 hubo fraude, y por eso el país no fue invitado a la cumbre por la democracia organizada en Estados Unidos, imaginen las elecciones del 2023, será un total fraude, ¿usted lo permitirá?.
Que no lo engañen por el hecho de usted haber sido arrastrado en las aguas de la corrupción creada por el sistema, exija que la cabeza cambie y no desmaye en su lucha contra esta pandemia que mata a muchos guatemaltecos de hambre o los obliga a migrar.
Profesor universitario, académico, profesional de las Ciencias Económicas.