Vamos a partir de varias premisas. Lo primero que debemos considerar es que la vida es corta. Nuestra vida es finita. Tiene un final. Si trazamos una línea del tiempo miremos los años ya vividos los cuales ya no cuentan porque ya pasaron; si por ejemplo tiene 50 años en la Biblia se menciona que la edad del ser humano es
de 70 años y los más robustos 80. De tal manera que si miras tu línea del tiempo puedes calcular cuantos años en promedio puedas tener de forma activa y cuantos definitivamente ya no podrás definirlo. Otra premisa importante es que la juventud es finita. Se acaba. Si consideramos esa línea del tiempo, nos daremos cuenta de qué debemos aprovechar al máximo nuestra vida. Cumpliendo nuestro propósito, ayudando a personas, dejando un legado por ejemplo. Sin embargo, todo esto depende de las elecciones que tú tomes. Las elecciones que hagas tendrán impacto en los próximos 10 años a lo menos. Podemos mirar 10 años atrás y nos daremos cuenta que lo que hoy somos lo decidimos hace 10 años. Por lo tanto es importante aprovechar al máximo el tiempo tomando decisiones adecuadas para no tener ningún remordimiento más adelante.
Muchos esperan el momento perfecto para tomar decisiones. Lo esperan con ansia. Sin embargo, el momento perfecto es hoy. Nunca habrá un momento perfecto para que usted tome elecciones. En el libro de Eclesiastés 11: 4-6 dice: “ El que observa el viento no siembra, y el que mira las nubes no ciega. Como no sabes cuál es el camino del viento, o cómo se forman los huesos en el vientre de la mujer encinta, tampoco conoces la obra de Dios que hace todas las cosas. De mañana siembra tu semilla y a la tarde no des reposo a tu mano, porque no sabes si esto o aquello prosperará, o si ambas cosas serán igualmente buenas. “ Lo anterior ejemplifica perfectamente que nunca habrá un tiempo perfecto: hoy es el tiempo perfecto.
Vivir en el sueño de otra persona es también uno de los arrepentimientos que podríamos tener en los próximos 10 años si no elegimos. Los mayores desafíos en la vida es descubrir quién eres, pero el segundo más grande, una vez que hayas descubierto quién eres, es ser feliz con lo que descubres en ti mismo y aprovecharlo al máximo. No puedes ir por la vida quejándote de lo que no tienes y no aprovechar lo que si tienes. Y eso también lo tienes que decidir hoy. No vivas el sueño de otro, vive tu propio sueño. También debemos considerar los fracasos. Hay una frase que dice: “ fallas el 100% de los tiros que no haces”. Fracasar y no volverlo intentar si se define como fracaso. Pero fracasar y continuar en la lucha significa aprendizaje. Eso también es una elección.
Por último: debes elegir tu eternidad. Si bien es cierto que los días del hombre sobre la tierra son en promedio 80 años y la eternidad no se puede medir, es importante mencionar que esta eternidad se decide en ese pequeño lunar de los 80 años sobre la tierra. Dios le dijo a los israelitas: delante de ustedes pongo el bien y el mal: escojan lo que ustedes quieran, pero ojalá escojan el bien. Eso es como darte un examen y darte las respuestas. Dios te dice que elegir lo bueno es lo mejor. Ojalá puedas elegir hoy la eternidad con Cristo Jesús.
Cardiólogo - Coach/Conferencista coachedwinibarra@gmail.com