ZONA HOLÍSTICA
Antes de hablar del tema debemos conocer la diferencia entre los términos migrante, emigrante e inmigrante ya que mucho se ha dicho por la caravana de los hermanos hondureños hacia Estados Unidos. Un inmigrante es la persona que llega a un país distinto del que es; emigrante es aquella persona que abandona su país para establecerse en el extranjero, y migrante es un término que engloba a todas aquellas personas que se trasladan de su lugar originario para otro lugar diferente, el término aplica tanto para englobar emigrantes como para inmigrantes.
Históricamente las poblaciones han migrado, por ejemplo, el pueblo hebreo migró a Egipto en busca de comida debido a una hambruna que azotó la región, después migraron a la tierra prometida, en esta época no se llevaba control migratorio. En la nueva era podemos mencionar la migración luego de la llegada de los españoles éstos llegaron a América en busca de mejorar las finanzas y afianzar su riqueza, en 1970 España iniciaba con el control migratorio haciendo anotaciones simples en libros para controlar a la población que viajaba a América, siendo hasta 1835 cuando se establece como obligatorio el pasaporte, ésta medida fue necesaria porque los barcos ocultaban pasajeros lo cual repercutía en que se perdiera el control en el cobro de impuestos.
En nuestra época y específicamente en Guatemala la migración más conocida es la que han realizado nuestros connacionales hacia Estados Unidos, sin embargo, hemos dejado de lado la migración interna principalmente de las poblaciones indígenas en busca de mejores oportunidades de empleo; según FLACSO el movimiento de poblaciones ha tenido tres momentos, el primero en 1950 cuando las inversiones estadounidenses se dedicaron a la producción en Guatemala contratando mano de obra, el segundo en 1976 con el terremoto y el tercero en 1980 por el conflicto armado interno que desplazo poblaciones tanto a lo interno como a lo externo del país.
En la época de postguerra la población siguió movilizándose internamente por estudios, trabajo o huyendo del crimen organizado y las maras, pero si ponemos atención a la fecha las razones para migrar como la falta de oportunidades, infraestructura, empleo, violencia y cambio climático que afecta su medio de subsistencia (las siembras), son las mismas que en la época antigua.
Todos conocemos a personas de aldeas o municipios que prestan sus servicios en las cabeceras, todos de alguna manera hemos sido migrantes o alguien de la familia se movilizó de su lugar de origen a otros departamentos o a la capital con el objetivo de superarse y mejorar su calidad de vida. Por lo que puedo afirmar sin temor a equivocarme que la migración es un mecanismo natural de sobrevivencia que se ven forzadas a realizar las poblaciones, si las aves y los peces migran para sobrevivir es natural que las personas también lo hagan hacia países en donde consideran que existe un futuro mejor para sus generaciones ante un Estado fallido que les ha vedado la más mínima oportunidad de desarrollo y ha cortado la esperanza de superación a las poblaciones marginales que no cuentan ni con los servicios básicos y son asechados por el crimen organizado.