Algore escribió su libro «Ataque a la Razón» en el hace referencia a la ausencia de debate en las cámaras de congresistas de los Estados Unidos. Pero no es una crítica al debate frío, es a la esencia de contenido en las discusiones. Desde los años noventa se avizoro una perdida total de posiciones filosóficas y epistemológicas en las discusiones de los líderes de los países a nivel mundial. Guatemala no fue la excepción al asumir el poder Alvaro Arzú, prácticamente un ignorante en lo que a contenido científico social se refiere, se fundo una era de políticos en el poder al servicio, eso sí, de grupos estratégicamente articulados. Diputados, alcaldes. síndicos y concejales han administrado la cosa publica sin rumbo, esa es la orden, hacer locuras, estupideces de todo tipo y en todo sentido, siempre y cuando se mantenga el status quo de la clase dominante. Militares y empresarios, dirigentes del CACIF, deciden quien gobierna, entre mas estúpido mejor, es fácil de dominar, pero sobre todo manipular, se deja dar ordenes, pues lo que más les interesa es el ego, saber que tiene el poder, que puede dar ordenes, ciertas ordenes sobre temas sin importancia, porque las importantes, las da él pero cumpliendo una agenda especifica que no es la suya.
Los políticos actuales, electos en 2015, son el mejor ejemplo de este sistema basado en la ignorancia, por ello no extraña para nada las decisiones que diputados y miembros del ejecutivo están tomando por medio de leyes y decretos. Cuando un grupo de diputados busca criminalizar la crítica que los medios de comunicación y la población hacen sobre su labor, queda perfectamente claro la ausencia de inteligencia y madurez de ellos. La incapacidad de aceptar que las cosas se están haciendo mal raya en el descaro de una clase política falta de reflexión y queda en evidencia que no tienen el mínimo interés de corregir el rumbo.
Pero no solo se trata de que los diputados, presidente, ministros y funcionarios de los tres poderes del Estado tenga una mínima capacidad de pensamiento y razón, están haciendo todo lo posible porque los guatemaltecos no tengan opciones para estudiar y soñar con una formación profesional de alto nivel.
La agenda esta clara y no hay duda, se debe atacar a las instituciones que forman pensamiento critico en la población. Reducir el presupuesto de la Universidad de San Carlos de Guatemala en Q259 millones de quetzales y aumentar en un monto similar el presupuesto del ejército es la mejor muestra del rumbo que le interesa al Presidente, a los diputados y a los líderes del CACIF. La orden es ahorcar a la institución de mayor peso científico en el país, la USAC con sus mas de 200 mil estudiantes y miles de profesionales egresados es, seguramente la amenaza al sistema más grande. Pero esos miles de profesionales y estudiantes también son culpables, algunos eligieron y apoyaron al actual partido de gobierno, otros han actuado en total indiferencia, poco les ha importado, no se involucran en lo mínimo.
Hoy peligra la Universidad de San Carlos, veremos en realidad a quienes defienden la institución, no porque peligre sus ingresos, sino porque esta en riesgo la construcción de una nación libre y soberana, basada en la razón y la ciencia.
Profesor universitario, académico, profesional de las Ciencias Económicas.