Hemos leído y escuchado que el amor propio es un trabajo de todos los días, y sí, hay días que se nos hacen más fáciles que otros, despertamos alegres y empoderadas, potenciando nuestra mejor versión… pero ¿qué pasa con esos días previos a la menstruación y durante ella? Las emociones están a flor de piel, nos invade la tristeza y frustración y parece que tenemos la capacidad de notar todos los defectos en nuestro cuerpo, los pensamientos negativos son inevitables y todo pareciera conspirar en contra nuestra.
Nos encontramos frente al espejo y la imagen que observamos la sentimos fuera de lugar, la ropa que elegimos parece no encajar, el cabello no tiene forma y nada cumple nuestras expectativas. ¿Cómo logro reconciliarme con mi cuerpo?
Todo cuenta, recuerda que en los pequeños detalles está, el poder de tu imagen.