Según la encuesta del Instituto Nacional de Estadística -INE-, para 2022 el 56.9% de los hogares encuestados no cuenta con acceso a servicios básicos como agua potable, saneamiento, extracción de basura, y electricidad entre otros.
También uno de los resultados, indica que el ingreso promedio laboral de la Población que tiene un trabajo formal es de Q2,846.50 mensuales., demostrando que los ingresos laborales promedio tuvieron un repunte, aumentado alrededor de Q700.00 que en 2017 era de Q2,150.00; aumentando apenas Q136.00 anuales aproximadamente; sin embargo, el aumento en el precio de la canasta básica al menos es de Q1,500.00 desde esa misma fecha, es decir que ha disminuido el poder adquisitivo del guatemalteco.
En otro sentido, es importante hacer notar que cada año se gradúan aproximadamente entre 180 mil y 200 mil jóvenes que necesitan una oportunidad laboral; además de ellos hay un acumulado de jóvenes y adultos en edad productiva que están esperando una oportunidad laboral, por lo que en el mercado laboral es mayor la oferta de fuerza de trabajo que la demanda empresarial para contratarla.
Derivado de lo anterior, es común ver que los jóvenes y señoritas recién graduadas que logran ubicarse en algún trabajo, lo hacen en el sector informal como dependientes de mostrador, agentes de ventas, o promotores de servicios financieros; sin que estos trabajos estén relacionados con la carrera técnica que estudiaron a nivel medio; en la mayoría de estos lugares en donde logran colocarse laboralmente no les pagan el salario mínimo ni les dan oportunidades para seguir con sus estudios universitarios debido a los horarios.
Derivado de lo anterior, ha ido en aumento la demanda para estudiar carreras técnicas en las universidades, es decir que los jóvenes quieren obtener un diploma técnico que les ayuda a posicionarse en el mercado laboral de mejor manera o les ayude a llevar una ventaja respecto a los demás.