No obstante que de acuerdo con lo legalmente establecido hasta enero del próximo año habrán de iniciarse las actividades relacionadas con el proceso electoral algunos aspirantes, ignorando la prohibición sobre el particular, se están adelantando a promoverse e incluso, por tal motivo el Tribunal Supremo Electoral ha advertido, entre otros, a los diputados Patricia Sandoval, Javier Hernández y Milton Guerra(Prensa Libre, Octubre 17 del 2018, página 3), abstenerse de esta imprudente actitud pues podrían no ser inscritos por esta osadía. Para no variar, los más obligados a cumplir con la ley, la están violando como lo siguen haciendo los oficialistas y el pacto de corruptos. Esto no es de extrañar pues con honrosas excepciones, desde la presidencia, hasta el congreso y otras dependencias del oficialismo, es precisamente donde se localizan los que violan la constitución y principales protagonistas de la corrupción que cada día agudizan más, la crisis política y social en Guatemala.
Estamos ya a dos meses y días para que, legalmente, se inicie el proceso electoral 2019. Para entonces, conoceremos a los aspirantes a cargos de elección popular que ya con insistencia, se rumoran; llegará el momento de escuchar discursos de todos los tamaños, colores y sabores; es precisamente a partir de ese momento y hasta el día de las elecciones, cuando los electores podremos analizar el perfil, objetividad o demagogia de las propuestas; será cuando tendremos la oportunidad de analizar si estamos frente a políticos capaces, honrados, transparentes y comprometidos con Guatemala, o politiqueros que solo llegan al poder para secundar lo que están haciendo muchos de los que nos gobiernan: olvidarse de los ofrecimientos de campaña, de defender los intereses del país, gobernar con capacidad y transparencia o imitar a muchos en lo que hacen y siguen haciendo los corruptos que nos gobiernan: enriquecerse acostillas del pueblo y defraudar a los electores que los han llevado al cargo para el que fueron electos. Como en política nadie ofrece ni regala nada sin esperar algo a cambio, principalmente con candidatos de escasos o medianos recursos, en situación como tal, surgirán los oportunistas de siempre para ofrecer financiamiento a cambio de ser favorecidos en y con sus negocios y obras cuando los ayudados, lleguen al poder; esto último sucede con mayor frecuencia con quienes buscan ser adjudicados y favorecidos con obras como la experiencia lo demuestra. Aparte y desde luego, con la distribución de gorras, playeras y otra baratija de las que más proliferan en todas las campañas electorales.
Creo es tiempo de reflexionar, conversar e intentar evaluar el desempeño de quienes actualmente, por medio del voto, llegaron a ocupar un cargo en la administración pública y el ejercicio del poder; de platicar serena e imparcialmente, sobre lo que ofrecieron cuando fueron candidatos y los resultados como gobernantes según el caso y nivel en que vienen desempeñándose: nacional y municipal que es a donde se accede por la vía electoral y, en función de ello, razonar en la responsabilidad que implica el ejercicio del voto para no ser cómplices del desempeño de quienes carecen de la más mínima preparación, cuando llegan a gobernar como existen tantas experiencias sobre la realidad en tantos países donde el nuestro, no es la excepción sino un triste, doloroso y ejemplo objetivo como consta a la sociedad en general y a los estudiosos de la política en particular. De tal manera que tenemos tiempo para meditar: solo meditando nuestro voto, podremos contribuir a frenar, o a fomentar la corrupción. Si votamos por los efectivos o potenciales corruptos y corruptores, seremos cómplices del deterioro a que se sigue conduciendo al país; votar por gente honesta, capaz y transparente, será, en las elecciones del 2019, la opción para recuperar lo que hoy se va por el desagüe de la corrupción, y destinarlo a satisfacer las necesidades que tanto ha reclamado, reclama y necesita la sociedad guatemalteca.
Soy un profesional comprometido con la transparencia, la crítica y la propuesta, e identificado con los problemas sociales; los intereses y necesidades de los de a pie. / lufesaldy@hotmail.com