A partir del presente mes, tenemos nuevo presidente y vicepresidente de la república, así como, nuevos funcionarios de gobierno, ministros, viceministros y secretarios, entre otros.
La percepción de muchas personas, es que la administración saliente del expresidente Jimmy Morales ha sido la peor, la más desastrosa de toda la historia del país. Esa apreciación, ya se había escuchado antes para gobiernos como el de Otto Pérez, Álvaro Colom y Alfonso Portillo. Definitivamente, tuvieron muchos desaciertos que les hicieron granjearse esos calificativos.
¿Realmente fue tan malo el gobierno presidido por Jimmy Morales?
Para responder, hay muchos factores que pueden tomarse en cuenta. En esta columna, abordaré los resultados de la economía durante su período de gobierno, de manera comparativa con las administraciones anteriores del presente siglo, aunque mi intención, no es señalar si fue o no, un mal gobierno.
De acuerdo a los datos estadísticos publicados por el Banco de Guatemala, de 2016 a 2019 (gobierno de J. Morales), la economía creció en esos cuatro años 12.3%, un promedio de 3.1% anualmente; de 2012 a 2015 (gobierno de O. Pérez, aunque no terminó el período), la economía creció en esos cuatro años 15%, un promedio de 3.7% anualmente; de 2008 a 2011 (gobierno de A. Colom), la economía creció 10.9%, un promedio de 2.7% anualmente; de 2004 a 2007 (gobierno de O. Berger), la economía creció 18.1%, un promedio de 4.5% anualmente; de 2000 a 2003 (gobierno de A. Portillo), la economía creció 11.3%, un promedio de 2.8% anualmente.
Por simple análisis, las estadísticas oficiales expresan que el período de gobierno, en que más creció la economía, fue el de Oscar Berger. Empezó con un crecimiento de 3.2% en 2004, 3.3% en 2005, 5.4% en 2006 y 6.3% en 2006, siendo estas dos últimas, las tasas de crecimiento económico más altas en lo que va del siglo XXI. El Presidente actual, ha ofrecido que la economía crecerá no menos de 5%, ojala así sea, aunque la tasa de crecimiento que se necesita, es mayor al 6%, para generar suficientes oportunidades de empleo y reducir índices como el de pobreza.
En segundo lugar, fue durante el gobierno de Otto Pérez (a pesar de la renuncia de él, su vicepresidente y los hechos que en 2015 acaecieron), que la economía creció a tasas superiores al 3%, registrando 4.2% en 2014 y 4.1% en 2015, tasas nada despreciables.
En tercer lugar, los mejores resultados de la economía, se han dado en el período del presidente J. Morales, particularmente en 2019, en que la economía creció aproximadamente 3.4%, una de las tasas de crecimiento más altas de Latinoamérica en ese año, mucho más que economías de la envergadura de México (que casi entró en recesión), Brasil y Argentina. Es un hecho que a pesar de ser señalado como el gobierno más corrupto y desastroso, los resultados de la economía del país, no han sido tan funestos, al contrario, mucho mejor que los que han registrado los demás países de Centroamérica. Solamente, queda la duda: si en este gobierno se hubieran tomado mejores decisiones, ¿cuánto más hubiera crecido la economía?, o probablemente, la economía depende de otros factores: ¿será el flujo creciente de remesas?, o independientemente, de quien gobierne, la mayoría de guatemaltecos se dedican a trabajar y ser productivos, tanto en el ámbito de la economía formal como la economía informal. Creo que si el presidente actual, procede con inteligencia, responsabilidad, analiza los errores de sus antecesores y evita repetirlos, puede obtener resultados mucho mejores y superar con creces el 5% de crecimiento económico que ha ofrecido. Tiene elementos a favor, como el soporte que dan las crecientes remesas, el fortalecimiento de la economía de nuestro principal socio comercial, Estados Unidos de América, el mejoramiento de precios de algunos productos de exportación, entre otros.
Los porcentajes citados supra, nos dicen también, que los gobiernos que tuvieron los resultados menores en crecimiento económico, fueron los de Alfonso Portillo y el más bajo, se obtuvo con Álvaro Colom, en cuya administración se obtuvo la tasa más baja de crecimiento económico de este siglo: 0.5% en 2009. Ante esos resultados, ¿podría decirse que estos han sido los peores gobiernos? Juzgue usted.
Creo que es importante, evaluar y dar la importancia que merece al comportamiento económico, porque como país no nos puede ir bien, si no contamos con una economía sólida y creciente, independientemente, de la tendencia filosófica, ideológica o política de quienes gobiernen.
Administrador público, economista, politólogo, abogado y notario, y profesor universitario.