Muchas veces, el ser humano necesita sentirse bien consigo mismo, gestionar alguna emoción, sentirse acompañado en una situación de angustia o mejorar sus relaciones interpersonales. En todos estos casos, los profesionales que pueden apoyar en estos temas son los psicólogos clínicos. Sin embargo, no siempre sabemos cómo elegir a nuestro psicólogo, o es una decisión difícil de tomar.
Considerar visitar al psicólogo es el paso más importante; luego se debe tomar en cuenta el tipo de terapia que cada persona necesita de acuerdo con el problema a tratar. Para ello, es preciso investigar qué tipo de terapia se requiere. Los psicólogos aplican diferentes enfoques terapéuticos, como la terapia cognitivo-conductual, psicoanalítica, sistémica, de pareja, etcétera, y en algunos casos, una terapia multidisciplinaria.
Después de investigar y definir el tipo de terapia que se necesita y el enfoque con el que el paciente se sienta cómodo, se debe buscar al psicólogo que ofrezca ese tipo de terapia y se enfoque en la solución de los problemas a resolver. Es importante comprobar las especializaciones del psicólogo, su trayectoria y experiencia, y decidir si se prefiere ser atendido por un hombre o por una mujer.
Antes de concretar la cita con el psicólogo, es fundamental averiguar si la sesión durará cuarenta y cinco minutos o una hora, y la tarifa que cobrará por cada sesión. Recordemos que este proceso requerirá varias sesiones y dependerá del tipo de problema que se debe resolver, entre otros factores.
Durante la sesión con el psicólogo, debe tomar en consideración lo siguiente: que esta persona le inspire confianza, que sienta que se están resolviendo sus problemas o inquietudes, que resuelva todas sus dudas, y que pueda depositar toda su confianza sin guardarse nada para sí mismo. Pero, sobre todo, es fundamental no sentirse juzgado.
Si no se cumplen estos criterios, deberá iniciar su proceso de búsqueda nuevamente y continuar hasta encontrar al profesional con el que tenga la confianza de compartir su vida y se sienta apoyado para confrontar sus problemas.