En el evangelio de Lucas capítulo diecinueve, verso 11 está contenida la parábola de las minas o del dinero, en donde Jesús les cuenta esta parábola a sus discípulos, es decir, que les revela otro secreto del Reino de Dios. Y les dice a sus discípulos: un hombre de la nobleza se fue a un país lejano para ser coronado rey, era de la nobleza y ahora iba a pasar a ser parte de la realeza, vemos niveles de status en el Reino de Dios. Ese hombre que pasaría de la nobleza a la realeza manda a llamar a sus siervos para entregarle a cada uno de ellos minas. Y aunque la prole no quería que este noble fuera coronado rey, regreso coronado como rey, y al regresar llega con sus siervos y el primero le dice he producido diez veces más.
Este nuevo rey, le da a conocer al siervo productivo las tres A de la productividad: 1. Aprobación, el rey le dice: hiciste bien siervo bueno y fiel, 2. Aumento, sigue la narrativa de esta parábola y dice que al siervo que no fue productivo le fueron quitadas sus minas y fueron entregadas al siervo que sí lo fue, por lo que aumentó el número de minas del siervo productivo. 3. Acceso, le dice el rey al siervo productivo: entra al gozo de tu señor, ahora ese siervo productivo va a entrar a dimensiones a las que antes no había entrado, a dimensiones en las que los improductivos no pueden entrar.
Hay ocho cualidades que debes conocer sobre este siervo productivo: 1. Para recibir recursos debes ser un hombre o una mujer dignos de confianza, ser personas confiables para dejar en tus manos esos recursos. 2. Y ya que tengas los recursos debes ser como ese siervo que multiplicó los recursos al desarrollar habilidades de negociación, al involucrarse al comercio, al involucrarse con la ley de la oferta y la demanda, con la economía. 3. Como el siervo productivo debes estar sujeto a la rendición de cuentas, para activarte en bienes raíces debes conocer la importancia de rendir cuentas. 4. Hay un principio que el siervo productivo nos enseña al decirle al rey que SU dinero había producido diez veces más, en el lenguaje del siervo: SU, notamos que el siervo era un buen mayordomo de los recursos, por eso es importante activar una mente y un corazón de mayordomía, debemos operar con mayordomía. 5. Una quinta cualidad de este siervo era la productividad, para que te confíen recursos debes ser altamente productivo, productivo en el máximo nivel. 6. No es necesario empezar con algo, únicamente necesitas tener la confianza para que te confíen algo. 7. Luego el rey le otorgó el gobierno de diez ciudades. Esto nos enseña que no es necesario ser dueño de los recursos, sino conocer a aquel que es dueño de los recursos. 8. Vas a ser activado en bienes raíces en la medida en que aprendas a direccionar el flujo de efectivo.
Empieza a operar con un nivel mayor de productividad y experimentarás, como el siervo productivo, las tres A de la productividad. Y para activarte en bienes raíces solo necesitas aplicar esas ocho cualidades que llevaron a este hombre de una dimensión de siervo a una dimensión de negociador, empresario, y gobernador.