Hay equipos de mucha tradición en el futbol de Guatemala y uno de ellos es el glorioso Xelajú MC, que este 24 de febrero llega a 80 años de historia y con mucho orgullo
Han habido muchos equipos en Guatemala que han competido a lo largo de la historia, algunos ya desaparecidos o por insolvencias han perdido la vigencia o categoría y otros hasta cambiado de nombre por la misma irresponsabilidad de sus dirigentes o la misma población que no los ha rescatado de las crisis a la cual entraron y nunca salieron, o algunos otros que han hasta vendido sus fichas, como por ejemplo Juventud Retalteca, Galcasa, Botrán, Deportivo Jalapa, Ases del Minar, Club Del Monte, Heredia, Deportivo Escuintla, Cementos Novella, Tipografía Nacional, etc.
Pero ha habido equipos que han descendido o caído en crisis económicas como los chivos y han resurgido desde las cenizas como el ave fénix, son pocos los clubes que tienen esa historia y vigencia como el ex aguerrido Xelajú MC, tres veces descendió y volvió a brillar.
La primera vez que ascendió el equipo lanudo fue en 1957, cinco años después conquistaría su primer titulo en la historia, luego descendió en 1978 y al año siguiente regreso, solo fue a pasear a la Liga Mayor “B” como se le conocía en ese entonces, al año siguiente consigue su segundo título (1980), en 1992 desciende, pero en esa oportunidad ya no puedo ir a pasear y tuvo que comprar al segundo año la ficha del equipo Del Monte de Izabal para retornar a la liga de los consagrados, su último descenso fue en 1999 y regreso como los grandes, arrasando en la primera división, en una gran final contra Deportivo Achuapa.
Estos fracasos o traspiés nos han enseñado a valorar a nuestra institución y ya no dejarla abandonada como en ese entonces sucedía, hemos aprendido las lecciones y las hemos superado, esas eventualidades lo hacen ser grandes en un país, sino miremos al Aurora ya nunca volvió a ser grande o protagonista, sigue refundido en la primera división y si no tuviera presupuesto del ministerio de la defensa, ya hubiera desaparecido, ni afición tienen y cuando fueron grandes obligaban a los soldados a llegar al estadio porque no había casi nadie apoyándolos en los graderíos, que tristeza que pagar para que la gente vaya a un estadio.
En 80 años se han conseguido cinco Títulos (1962, 1980, 1996, 2007 y 2012), cinco subcampeonatos (1963, 1966, 1981, 2010 y 2018) los primeros dos quizá se los arrebataron los árbitros para favorecer a equipos capitalinos, cuatro campeonatos de Copa (1962, 1963, 1973 y 2011), dos subcampeonatos de copa (1995 y 2005), un subcampeonato de Fraternidad Centroamericana 1982 (ahora UNCAF) y una clasificación a cuartos de final de Concacaf en el año 2013.
Es el equipo más laureado en la provincia de Guatemala, no creo que esto lo pueda superar cualquier equipo hoy en día, a pesar que la nueva historia de títulos se han sumado Antigua y Guastatoya, no tienen la historia y abolengo que poseen los chivos, mas aún por la calidad de jugadores que han militado a lo largo de su historia y no digamos los perfiles de técnicos que ha tenido en el banquillo en estas ocho décadas.
La pasión que tiene el aficionado al futbol en Quetzaltenango es indescriptible a comparación de otras aficiones, es un amor puro a un equipo, a una tierra, a una institución arraigada desde las entrañas más profundas de cualquier quetzalteco, realmente es un sentimiento que no lo posee cualquier aficionado al futbol, acá se vive una pasión y amor diferente por este equipo querido.
No conozco en Guatemala afición que este haciendo cola cinco horas antes de abrirse las puertas en un estadio, es más en una final quizá sea una noche antes, es casi una religión el futbol acá, no de balde se le ha llamado la mejor afición de Centroamérica. Técnicos y jugadores extranjeros que han venido al club se quedan asombrados de la pasión con la cual se vive el futbol en Xela.
Es más, conozco personas aficionadas chivas, que, si el equipo pierde, dejan de almorzar o descansar con sus familias, es un sentimiento y amor a una tierra, un fenómeno quizá heredado de generación en generación, me acuerdo aun cuando de niño no teníamos dinero para entrar al estadio, nos colábamos o nos saltábamos la pared, pero se convertía en una necesidad ver a nuestro amado equipo lanudo.
Pasarán más años y esta historia se repetirá, porque el Club Social y Deportivo Xelajú MC seguirá movilizando personas y por ende corazones, es de los pocos equipos en el mundo que llevan añadido un nombre propio, en honor al caballero del deporte Mario Camposeco con sus siglas “MC”, fue en memoria a él en 1951 y perpetuar su nombre y apellido propio, un año posterior a su muerte, la cual acabó con una carrera exitosa que traía no solo en su querido equipo chivo, sino también siendo goleador en Selección Nacional con su compañero de fórmula Carlos “Pepino” Toledo.
Club Xelajú MC siempre te llevaremos dentro de nosotros, te amaremos hasta el final de nuestros días y sigue dándonos satisfacciones como lo has hecho, independientemente qué directivos o jugadores estén, la institución es la que nos importa aunque no muchos te valoren, eres patrimonio de nuestra tierra y vives en el corazón de cada quetzalteco, ¡qué viva el equipo chivo!