Esta tarde se puso fin al dilema entre la Municipalidad de Quetzaltenango y los alcaldes comunitarios del municipio, porque hay un acuerdo preliminar de ir por la vía del diálogo.
Ambas partes decidieron ceder un paso, por su lado el alcalde Luis Grijalva se comprometió a retirar la denuncia penal que había presentado en el Ministerio Público (MP) en contra de los líderes comunitarios, y ellos, en su caso, desde mañana a primera hora liberan el paso hacia el botadero municipal del Valle de Palajunoj.
Por lo anterior, desde mañana se normaliza la recolección de basura domiciliar y comercial parada por 48 horas y que puso en aprietos a la población. Aunque se debe entender que toda la basura que generamos va a parar a alguna parte, por ello, mientras menos mejor. El basurero del Valle está desbordado y es un foco de contaminación para los pobladores de la zona y un peligro para el manto freático en general.
Ante este encontronazo que llegó a medidas legales y, de hecho, lo mejor es irse por la vía del diálogo y la mediación. Para lo segundo, se está pensando en que el mediador sea un representante de la Procuraduría de los Derechos Humanos o el director de la División de Ciencias Jurídicas del Centro Universitario de Occidente, el doctor en derecho, Carlos Calderón.
El plazo es que en 75 días haya una serie de acuerdos entre el gobierno local y los vecinos, quienes consideran que el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) debe ser una medida equilibrada entre los intereses públicos y de los particulares.