“El aprendizaje es experiencia, todo lo demás es información”, Albert Einstein.
La educación tradicional nos ve como depósitos que hay que llenar con datos, “educación bancaria” (Freire, 2005) y, si bien la información es importante y relevante, en el aprendizaje lo más significativo es lo que sabes hacer con la información que posees; si no sabes hacer nada con la información que tienes, no has aprendido; simplemente estás más informado, pregúntate: ¿qué puedo hacer con lo que sé?
Tener la receta no es aprendizaje auténtico; tener un mapa no significa conocer el terreno; tener el diseño de algo, no significa tener el producto; el verdadero aprendizaje es experiencia; siempre busca la nueva experiencia. No te quedes con las recetas, hazlo, experimenta, aplica. No te quedes con el mapa en las manos, recorre el territorio, camina, muévete, ponte en acción. No te quedes con el diseño, crea el producto o servicio.
Cuando vives auténticas experiencias de aprendizaje continuamente pones en juego todo tu ser: lo que sabes, lo que no sabes, tus valores, habilidades y en la interacción con los demás y con tu entorno, te transformas, produces, aprendes y trasciendes. Compromete tu participación activa en auténticas experiencias de aprendizaje para desarrollar al máximo tu pasión.
Busca participar activamente en experiencias de aprendizaje según tus sueños y propósitos; ya no se trata de lecciones en donde te trasladan información; ahora se trata de vivir auténticas experiencias de aprendizaje, con sentido y significado para tu vida; pueden ser proyectos, intercambios, inventos, producciones, debates, servicios, emprendimientos, seminarios, etc.
No te quedes con la intención, toma acción. Participa en todas aquellas experiencias que pongan en juego todo tu ser para aprender de forma integral y desarrollar al máximo tu pasión. Ya no se trata de un aprendizaje pasivo; se trata de un proceso de aprendizaje activo en donde tú eres el actor más importante.
Aprende con todo tu ser; aprende de forma integral, transforma tu vida para el bien de la sociedad. Busca experiencias útiles y significativas continuamente.
Pregúntate, responde y acciona: en qué nuevas experiencias de aprendizaje auténtico debes implicarte: proyectos, intercambios, inventos, producciones concretas, debates constructivos, servicios concretos, emprendimientos, seminarios, etc.