Xelajú MC acaba de terminar y escribir en su historia uno de sus peores torneos, no pudo clasificar a la liguilla y a pesar del mal torneo, afortunadamente no sufrió el descenso porque hay clubes como Sololá y La Nueva Concepción que tuvieron peores resultados y desempeños.
Mucho se habla desde hace años y, en cada aniversario, del último campeonato obtenido por los Superchivos, sobre ¿cuál es el camino a seguir o cuál es el problema del club? Puede haber muchos factores que influyen y afectan definitivamente, pero hay algunos que prácticamente nadie expone o menciona, y a continuación yo daré mi punto de vista sin guardarme nada.
Uno de los principales problemas en el club es en la mayoría del personal y colaboradores que forman parte del club desde hace años (sacando de este comentario al gran y querido Willy Santana, que en paz descanse); hay personajes que se encargan de llevar las pelotas, organizar la cancha, tratar lesiones, laboran en el mantenimiento del club, son gestores del área administrativa entre otros, que sacaron raíces y nadie los mueve, y en su gran mayoría son nocivos para la institución. ¿Por qué? Pocos mencionan este tipo de situaciones que suceden desde hace años en el club, como el llevar licor y cigarros entre otras cosas en pachones fingiendo ser hidratantes, entre las pelotas o el vestuario, para poder “pasarla bien” en los viajes, concentraciones o incluso entrenamientos, sin importar la disciplina u ordenes impuestas; estos personajes dañan con su actitud y actos a juveniles y jugadores del equipo mayor, solapando y fomentando la irresponsabilidad y el vicio, y cuando alguien quiere erradicarlos, se unen cual sindicato y desestabilizan a quien quiera ordenar la casa.
La disciplina es un factor que en Xelajú se ausenta en muchas etapas o periodos, porque van y vienen entrenadores, pero los del “inventario” no se mueven y pudren a los demás con su indisciplina e irresponsabilidad.
Sumemos la anarquía y mal manejo directivo en la toma de decisiones, manejo administrativo y deportivo en el club, es un cáncer que en lugar de tratarse, crece cada día más.
Si se quiere un cambio en la institución, no solo hay que cambiar estatutos, no solo hay que abrir la puerta a nueva gente e ideas, no solo hay que contratar buenos técnicos o jugadores, hay que hacer algo súper importante y que nadie ha logrado hacer y es: LIMPIAR LA CASA…
Cortita y al pie…
Las cosas como son.