La delincuencia volvió a poner de pie a los grupos de ronda en el municipio de Salcajá, Quetzaltenango, antes de que los ponga de rodillas, y esta semana reanudaron la vigilancia durante las horas en que la población duerme.
Pero estas acciones de seguridad no terminan cuando los patrulleros regresan a sus hogares. Durante la mañana, se mantiene un sistema de comunicación y alerta para poder responder ante un hecho delictivo en cualquier parte de la comunidad.
Este grupo lo integran padres de familia, hijos y abuelos, artesanos, comerciantes, profesionales y personas de distintas religiones. Pero al caer la noche, cambian sus instrumentos de trabajo por un palo, machetes o quizá hasta un arma de fuego con su respectiva licencia; todo lo necesario para poder defenderse en caso de toparse con un grupo de maleantes.
Adalberto López es coordinador de la junta directiva de este grupo de vecinos organizados, cargo que ha ostentado durante décadas y hoy cuenta con experiencia. En esta oportunidad, se han afinado las estrategias y, más que un grupo de personas dedicadas a vigilar por las noches, se ha articulado un tejido social específicamente para contribuir con la seguridad del municipio, donde están involucrados agentes de la Policía de Tránsito, Municipal y otros actores de la comunidad.
Adalberto López hace un llamado para que otras personas se adhieran, aunque advierte que previo hay un proceso de selección, donde se comprueba la honorabilidad del vecino y así evitar infiltrados. Agrega que se reúnen el último miércoles de cada mes y cuentan con un experto en seguridad que les asesora.
Ante estas acciones, personas reaccionaron positivamente en las redes sociales, pero principalmente vecinos de Salcajá, quienes además agradecen por ese sacrificio de dejar el calor del hogar y salir al frío de la época para velar el sueño de la comunidad entera.
Edgar Estrada escribe: “Felicitaciones por tomar la decisión y la iniciativa de cuidar al pueblo y a la niñez de dicho lugar”.
También, Elmer Pérez comenta: “Solo el pueblo unido cuida al pueblo. Debe ser un ejemplo a seguir para los pueblos vulnerables ante la ola de robos y actos delincuenciales”.