La Asociación Guatemalteca de Psicología Jurídica y Forense en concordancia con la Asociación Nacional de Psicología Jurídica de México, han dejado fija su postura, esta es una buena película, incluso para el análisis de casos, pero no es apta para niños ni adolescentes.
Luego de haber estudiado a detalle la Película de Todd Phillips, Guasón, la referida Asociación hacer las siguientes observaciones:
“Guasón es una película con una trama bastante seria y profunda que versa alrededor de las dificultades que atraviesa un enfermo psiquiátrico con diversas manifestaciones que van desde el Síndrome Pseudobulbar hasta un muy probable Trastorno de la Personalidad Antisocial.
Esta dinámica psicopática sirve de base para la ejecución de acciones parricidas, mediante femicidio por asfixia, asesinatos con arma blanca y arma de fuego, pareciera que estas últimas forman parte de la diversa oferta cinematográfica de estos tiempos; sin embargo en este caso, son acciones violentas que devienen de un personaje con el que desde 1940, las distintas generaciones se han vinculado afectivamente, lo que genera incongruencia y una cierta naturalización de la violencia que habrá de generar conflicto en quien sin comprenderlo lo observe.
Por la categoría que en las salas de cine tiene Guasón, B12, se ha permitido el ingreso de adolescentes, (y niños con características de adolescente 12, 13 y 14 años) a escenas groseras y vulgares de violencia femicida en contra de la propia progenitora, homicida en contra de los amigos, violencia psicológica y física en contra de la supuesta figura paterna; además de un ambiente de violencia social derivado de la lucha de clases; acciones muy difíciles de comprender y asimilar, y, mucho menos de asociar al «mismo personaje» observado en las historietas de DC Comics a mediados de Siglo XX, la llegada a la TV con el personaje Guasón interpretado por César Romero y por Jack Nicholson en el cine.
Este Guasón, no llena las características del antihéroe, no es el personaje imaginado que se deriva de la serie Batman, este Guasón es otro, es uno evidente y psiquiátricamente muy conflictuado cuyo comportamiento debería ser visto por adultos únicamente, no por niños y adolescentes que esperan encontrar una dinámica muy al estilo del comic, este no es el caso.
Por lo anotado en los párrafos anteriores, la Asociación Guatemalteca de Psicología Jurídica y Forense en consonancia con lo publicado por la Asociación Nacional de Psicología Jurídica (México) se pronuncia en el sentido de orientar a los adultos para que maduramente comprendan que esta película, no es recomendable para niñez y adolescencia, la trama es complicada, aborda áreas de la vida, que para comprenderlas sin verse afectado, se debería haber alcanzado cierta madurez, esa madurez de la que se carece al atravesar los estadios de edad de niñez y adolescencia.
No debería tomarse en cuenta que las diversas cadenas de salas de cine en Guatemala la ofrecen como B12, esto es muy cuestionable, esta película debería ser Categoría C. Muy probablemente esa categoría -B12- obedece más a razones comerciales que a una Responsabilidad Social Empresarial.
Guasón es una muy buena película para adultos que permite conocer, estudiar y analizar varias cuestiones en concreto:
1. la dinámica conflictuada de los trastornos mentales;
2. el abordaje de la salud mental desde las Dependencias del Estado con bajo presupuesto;
3. los resultados de no disponer de Servicios Sociales de Salud Mental;
4. la dinámica familiar psicopática donde se ejecutan acciones de violencia con características de delito, en contra de niñez y adolescencia
5. las secuelas en la vida adulta de una niñez y adolescencia en condiciones de víctima de violencia en todas sus formas
5. la violencia parricida
6. la violencia femicida y homicida en el trastorno mental
7. la violencia psicológica y física contra miembros del grupo familiar
8. la convivencia de un niño en una familia monoparental materna, donde la progenitora resulta ser una mujer con características de paciente psiquiátrico
9. el «después» del enfermo psiquiátrico institucionalizado cuando vuelve a casa sin un círculo de apoyo familiar adecuado, sin seguimiento, sin apoyo institucional y sin acceso a los recursos medicamentosos y sin atención profesional en Salud Mental.
10. los procesos de adopción sin un concienzudo estudio y seguimiento psicológico y social de la familia adoptante
Con todo ello se puede deducir que Guasón, es una magnifica producción que aborda la Salud Mental afectada, no es una película de superhéroes y fantasía adecuada para niñez y adolescencia. Es una película para adultos.
Lo cuestionable no es la película y su argumento. Lo cuestionable es el momento de edad, experiencia y madurez con que debe verse.
Con esta información ya queda a criterio de los adultos, la elección que hagan al establecer con quien se habrán de acompañar al cine”.