Mayormente, el cuerpo humano está formado por agua, incluso se indica que el 75 por ciento de los músculos es agua, por lo que es indispensable tener un correcto consumo de este vital líquido para gozar de la buena salud.
Según el Instituto Europeo de Hidratación, principalmente el agua es importante para que el cerebro funcione correctamente. Cuando una persona está correctamente hidratada, las células que existen en este indispensable órgano humano reciben sangre oxigenada, lo que mejora la capacidad de realizar operaciones, reaccionar mejor y ser más eficientes.
También el consumo adecuado de agua es esencial para que los riñones hagan correctamente su trabajo, que es depurar toxinas a través de la orina.
El agua también es necesaria para mejorar el tracto digestivo, pues permite la disolución de nutrientes para que estos puedan ser absorbidos por la sangre y transportados a las células.
Además, funciona como lubricante para los músculos y las articulaciones. También permite mantener la elasticidad en la piel.
Por eso, es recomendable que una de las primeras actividades del día sea consumir agua, incluso antes de desayunar, con la finalidad de brindarle este aporte al organismo desde la madrugada.
«Carmen García Torrent, nutricionista y licenciada en Ciencia y Tecnología de los alimentos señaló que lo recomendable es tomar uno o dos vasos de agua en ayunas y luego seguir tomando el líquido durante el resto del día hasta llegar a los dos litros», detalla un artículo de la BBC.