Por Flory Ramírez / corresponsal en EE. UU.
Los Helados Artesanales Xelajú están provocando antojos y despiertan nostalgia en quienes los disfrutan en esta ciudad de Estados Unidos donde se concentran guatemaltecos.
Un producto elaborado por el heladero Elías Rojas oriundo de la aldea Las Ventanas, Cabricán, Quetzaltenango, Guatemala.
Este es un helado con carácter y sabor de barrio, sin tantos conservantes artificiales, y eso es lo que hace que las personas estén encantadas con estas delicias.
Elías nos cuenta que su esposa Marleny Pérez es quien tiene la receta secreta de esta tradición familiar, pues es un negocio ya de tercera generación.
Ellos priorizan los ingredientes y extractos selectos que garanticen resultados únicos, para brindar sabores clásicos y cremosos. Tales como: vainilla, fresa coco, mango, entre otros.
Cuentan que decidieron emprender y retomar el oficio que ejercían en su natal Cabricán, al ver que hay una concentración de connacionales radicados en dicho estado, y que no había nadie que ofreciera ese sabor.
De lunes a viernes trabajan en construcción y los fines de semana se dedican a vender sus helados inigualables.
Se levantan de madrugada para elaborar los helados y así dirigirse a donde los invitan para poder refrescar el paladar de las familias y amigos. Esta etapa es de verano ardiente en Virginia.
Elías y Marleny sueñan con llegar a establecer su propio local de helados Xelajú, aunque están conscientes que, para lograrlo, seguirán trabajando arduamente hasta lograr su meta con la bendición de Dios y el apoyo de la comunidad guatemalteca.
Elías tiene clara una idea: “el éxito no proviene de lo que hacemos ocasionalmente, viene de lo que hacemos constantemente”.