Por fin todos somos conscientes de que llevar mascarilla cuando salimos de casa es imprescindible para atajar la expansión del virus SARS-CoV-2. Dependiendo del tipo de mascarilla, impide contagiarte (las FFP2, FFP3 y N95) o que contagies a los demás (las quirúrgicas).
La barrera textil retiene las gotas que se catapultan al medio ambiente al toser, estornudar o simplemente al hablar. Como dice el Instituto Robert Koch alemán, si todos participamos, el riesgo de infectarse se minimiza.
Uso correcto de las mascarillas
Daniel Griffin, experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de Columbia, advirte que ponerse de cualquier manera una mascarilla sirve de poco.
«Las máscaras fallan en los estudios porque las personas no las usan correctamente. Por ejemplo, muchas personas tocan el frente de la máscara o la empujan hacia abajo dejando la nariz expuesta para poder respirar mejor», explica.
Si vas por la calle puedes ver a personas con mascarillas por el cuello y fumando u otras dejando que cuelguen de una oreja. Todos estos son errores de aplicación debido a la falta de información, que, por cierto, nadie se está ocupando de ofrecer. ¿Por qué las mascarillas no se reparten con instrucciones?
Consejos para usar bien la mascarilla