Damari Yaneth Ambrosio Vásquez, de 49 años, sufrió un accidente hace varios años que se complicó por una mala práctica médica en su columna y que la obligó a quedar en silla de ruedas.
Ambrosio Vásquez, originaria de Escuintla y residente desde hace 35 años en Xela y actualmente en Llanos de Urbina, Cantel, comenta que desde que quedó en silla de ruedas la vida se le complicó porque sus familiares y las personas de la iglesia a la que asistía le dieron la espalda.
A pesar de estar en silla de ruedas trabaja como costurera para alimentar a sus hijos.A pesar de no poder caminar decidió hacer un préstamo de Q7 mil en una entidad bancaria privada y compró una máquina de coser con la que emprendió un negocio propio usando sus habilidades como costurera, sin embargo, sufrió el robo de su máquina que era su principal fuente de ingresos y el banco que le hizo el préstamo la demandó por falta de pago y actualmente le exige el monto de más de Q27 mil.
A pesar de las adversidades, doña Damari volvió a iniciar un negocio propio llamado «Rapicosturas Mani» y cada sábado se trasladada desde Cantel hasta la rotonda a la Marimba, zona 2 de Xela, para ofrecer, de 8 a 14 horas, trabajos de costura de prendas de vestir, bisutería, pulseras artesanales, shampoo, cereal, entre otros, para costear sus gastos médicos, mantener a sus cinco hijos y ayudar a sus siete nietos.
«Lucho cada día para salir adelante. Es irónico que una mujer con el cuerpo remendado como yo arregle cosas para los demás, pero siempre he pensado que con ganas, fe y buena actitud podemos superar las adversidades. Dios nunca me ha abandonado; no hay nada imposible en la vida», expresó.
A pesar de las adversidades nunca deja de sonreír.Vanesa Morales, quien viajó de la ciudad capital a Xela, dijo que acudió al negocio de doña Damari para llevarle prendas de vestir que necesitan remiendos y así contribuir con ella.
«Ella es un gran ejemplo para todos porque a pesar de estar en silla de ruedas no se rinde y sigue adelante trabajando honradamente. Muchos que tenemos todo no valoramos las pequeñas cosas de la vida», manifestó.
La deuda y su delicado estado de salud la obligan a hacer un llamado de ayuda a las personas de buen corazón y a abogados que puedan asesorarla para salir de la demanda que enfrenta. La manera en que puedes apoyarla es acudiendo a comprar a su negocio o llevándole prendas de vestir para remendarlas. Si usted desea contribuir con ella también puede comunicarse al 34006621.
Publicación inicial que se hizo viral en La voz de Xela.