La ciudad de Louisville, en el estado de Kentucky, vive este inicio de semana un nuevo episodio de violencia armada con el tiroteo en un banco que deja cinco personas muertas y varias más heridas.
La policía llegó al lugar solo minutos después de haber recibido varias llamadas por disparos en las instalaciones del Old National Bank, donde el atacante todavía estaba disparando a su llegada.
El sospechoso, que podría haber tenido un vínculo con el banco, murió poco después, pero las autoridades todavía están tratando de averiguar cómo.
Este episodio se suma a las alarmantes cifras de muertes por arma de fuego en Estados Unidos, que en 2021 superaron las 49 mil, un número sin comparación con el de otros países desarrollados.