A través del curso de especialización técnico en Producción de Semillas Nativas, dirigido a extensionistas y técnicos agrícolas de varias organizaciones, gubernamentales y no gubernamentales, se buscaba fortalecer los procesos locales de producción de semillas nativas y criollas de hortalizas.
Dicho curso, que estuvo dividido en 10 módulos y se desarrolló a lo largo de 20 meses, finalizó este mes. “Nuestra idea es generar capacidades para que las comunidades produzcan su propia semilla”, refirió Carlo Sum, coordinador de formación del proyecto Buena Milpa, quien recordó que muchas de las intervenciones que ellos acompañan en el tema de diversificación de dietas, incluía la implementación de huertos de hortalizas en traspatios, pero muchas veces no se cuenta con el recurso principal que es la semilla, por lo que las intervenciones duran hasta que se acaba el apoyo en semillas.
Héctor Castro, extensionista de agricultura del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, sede Totonicapán, explicó que el curso fue muy importante porque las familias en las comunidades están dejando de consumir plantas nativas, por lo que con el conocimiento adquirido podrán enseñar a obtener las semillas para mantener los cultivos, y mejorar la nutrición en las comunidades.