En plena temporada de frío, los Bomberos Voluntarios de la ciudad enfrentan una difícil situación en las calles de Xela. Durante noches y madrugadas, reciben llamados de emergencia sobre personas indigentes que se encuentran en la calle sin refugio.
A pesar de los esfuerzos de los bomberos por trasladar a estas personas a albergues, en muchos casos se encuentran con una negativa por parte de los encargados. Según los bomberos, a veces se niegan a abrir las puertas, lo que deja a estas personas en la calle y expuestas a las inclemencias del clima.
El mismo problema ocurre con personas que sufren de alcoholismo. Los bomberos los trasladan a casas de recuperación, pero en muchos casos les informan que ya no hay cupo disponible.
Ante esta situación, los bomberos hacen un llamado a los responsables de los albergues y casas de recuperación para que tomen medidas para evitar casos de hipotermia y otros problemas de salud relacionados con el frío.