En la Quita Compañía de Bomberos Voluntarios de Quetzaltenango brotó la semilla de servicio para integrar la Brigada de Rescate de Occidente y, a pocos años de integrarse, ya ha estado en acción. Recién fueron parte de los protagonistas del Macro Simulacro de Terremoto realizado en la ciudad de Guatemala.
Todos los integrantes son voluntarios, pero luego de jornadas laborales y compromisos en el hogar dedican parte de su tiempo para la constante capacitación, turnos de servicio y actividades.
Durante el Macro Simulacro, el grupo de rescatistas de la sede en Quetzaltenango participó en actividades de búsqueda, encamillamiento y rescate aéreo, donde utilizaron un arnés para trasladar a un herido halado desde un helicóptero.
Entre los brigadistas altenses hay pilotos aéreos y paracaidistas, por lo que están preparados para llevar a cabo tareas por tierra, agua y aire. También tienen perros entrenados y tanto la iniciativa privada como instituciones apoyan constantemente.
En los recientes días, una empresa de construcción donó una sirena y sistema de luces a la unidad de rescate 971, pero seguidamente un taller mecánico le hizo ajustes y cambió algunos accesorios, a modo de contribución, aunque el costo superó los Q20 mil.
La primera promoción también acaba de concluir el curso Búsqueda y Rescate en Estructuras Colapsadas y continúan en la gestión de otras capacitaciones.
Experiencia
Además de conocimientos, la Brigada de Rescate de Occidente ya tiene experiencia. Durante las inundaciones y deslaves ocasionados por el Fenómeno de la Niña que duró los últimos tres años hicieron tareas de rescate en las comunidades más afectadas. Han prestado servicio en turistas extraviados en áreas volcánicas y búsqueda de cuerpos luego de un derrumbe.
Pie de foto: En la Brigada de Rescate de Occidente hay pilotos y paracaidistas, por lo que están preparados para prestar servicio por aire, mar y tierra.